Por fin llegó la primera victoria del Balonmano Dólmenes Antequera, como anfitrión, en la temporada 23-24. El Argüelles desprende magia y eso se notó en una cita importante como la del pasado sábado 7 de octubre. Los verdes recibieron al Alcobendas y no fallaron ante su gente. Duelo de equipos con estilos similares que se llevaron los locales 31-29 a base de garra, compromiso y mucha efectividad ante portería.
El ritmo de inicio del choque fue fulgurante por parte de ambos. El Dólmenes golpeó primero y cogió muy rápido ventaja (6-3 al minuto 7) gracias a una buena defensa y un inspirado Oso Mendieta bajo palos. Sin embargo, aprovechando la inferioridad numérica a los 10 minutos, los madrileños consiguieron empatar 6-6. No se arrugaron los de Chispi y pronto recuperaron su renta.
Especialmente inspirado estuvo Nacho Moya, que terminó con 8 tantos. Fue letal e imparable en el lanzamiento y eso permitió a la escuadra local llegar al descanso con 19-15. Tras pasar por vestuarios, el Dólmenes Antequera tuvo un gran inicio de segundo tiempo y se colocó seis dianas arriba, incluso tuvo bola para ponerse de siete. Las exclusiones volvieron a pasaron factura al plantel verde que encajó un parcial de 0-4 y el Alcobendas redujo la desventaja a solo dos tantos.
El cuadro visitante nunca dio por perdido el choque, pero la formación antequerana se repuso y volvió a coger distancia en el marcador hasta el definitivo 31-29. Los dos puntos se quedaron en casa del Dólmenes Antequera, que ya suma un total de cinco. El miércoles 11 de octubre, a las 20:30 horas, afrontará la primera ronda de la Copa del Rey ante un rival de Asobal, Anaitasuna. En la próxima jornada liguera visitará al Ibiza.
