Ancelotti dice que todo el mundo les daba por muertos y el Real Madrid nunca muere. El entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti, se mostró encantado con la capacidad de sufrimiento y la entrega defensiva de su equipo este miércoles para superar al Manchester City y avanzar a semifinales de la Liga de Campeones, cuando todo el mundo les «daba por muertos», enseñando una vez más la épica del club blanco.
«Hemos empezado bien, nos hemos adelantado y después nos pusimos atrás, a defender, a sufrir, a sacrificarnos. Pensábamos jugar de manera distinta, al adelantarnos en el marcador hemos bajado el bloque demasiado. Ahí el City ha tenido más control. Siempre el City tiene más control, pienso que hemos defendido muy, muy bien», dijo en declaraciones a Movistar Plus, recogidas por Europa Press.
Ancelotti dice que todo el mundo les daba por muertos y el Real Madrid nunca muere
Ancelotti recordó que la épica es parte del ADN de los blancos, por lo que no dudaba de que lucharían hasta el final, sacando el billete en los penaltis con un Lunin que detuvo dos lanzamientos. «El Real Madrid le hemos visto muchas veces este ejercicio, este escudo te lleva a sacar algo que nadie se piensa que puede tener», afirmó.
«Estábamos convencidos en la tanda que nos íbamos a clasificar. Lunin ha hecho un partido fantástico, estaba convencido. A mí me gusta mucho cuando veo un equipo que lucha, además de la calidad. Ganar aquí se podía hacer sólo de esta manera», añadió.
Por otro lado, el técnico italiano desveló la conversación con Pep Guardiola después del partido y confió en tener a su equipo listo para el Clásico contra el FC Barcelona del domingo. «Nos ha felicitado, nos ha deseado suerte. Guardiola ha sido un señor como es el Manchester City», comentó.
«Estamos muy bien, no tenemos problemas físicos, el desgaste ha sido grande pero tenemos tiempo para recuperar, a darnos cuenta que hemos hecho algo muy bueno, otra vez en la semifinal. Todo el mundo nos daba por muertos, nunca dar al Madrid por muerto, el Madrid nunca muere», terminó.