La Autoridad Portuaria de Almería (APA) ha puesto a prueba el plan de protección del puerto de la capital a través de un ejercicio de coordinación con un simulacro ante una amenaza de bomba en uno de los buques atracados.
En el ejercicio efectuado la pasada semana participaron los ferris ‘Almariya’ y ‘Volcán de Timanfaya’, del Grupo Armas Trasmediterránea, así como la Policía Portuaria y los diferentes departamentos especializados de la Guardia Civil, además de Capitanía Marítima, Salvamento Marítimo y Protección Civil.
El ejercicio práctico ha consistido en la búsqueda de un posible artefacto explosivo en el buque Almariya, tras el aviso de amenaza de bomba, según ha indicado la APA en una nota.
Con este simulacro se han evaluado los sistemas de protección del Puerto de Almería, de los buques y los tiempos de respuesta de cada organismo participante, así como la coordinación entre todos los implicados.
Ante la indeterminación de la ubicación exacta del supuesto artefacto, Guardia Civil y los grupos Tedax y GEAS han comenzado su búsqueda terrestre en la bodega del buque y subacuática por el casco del barco, previa realización de todas las comunicaciones a los organismos implicados, para que se personen en el puesto de mando avanzado, ubicado en las inmediaciones de la zona de atraque, desde donde se han coordinado las actuaciones.
Durante la inspección del buque ‘Almariya’, se ha recibido una llamada del ‘Volcán de Timanfaya’ que señalaba la localización de un polizón tras su llegada al puerto de Almería, lo cual ha obligado a investigar que pudiera o no tener relación con la amenaza del buque ‘Almariya’. Por este motivo, se ha decidido realizar también la inspección de la bodega y el casco del ‘Volcán de Timanfaya’ e interrogar al polizón, descartándose finalmente su relación con la amenaza.
Alrededor del buque, se han posicionado embarcaciones de Guardia Civil del Mar y de Salvamento Marítimo, que se han mantenido en alerta ante cualquier suceso que pudiera acontecerse y que pudiera poner en riesgo a personas, buques e instalaciones. A su vez, en tierra se ha dispuesto de medios sanitarios por si se requería su actuación o el traslado de posibles heridos o víctimas. Finalmente, desde el puesto de mando avanzado se ha determinado la «falsa alarma» en el marco del simulacro.