El portavoz del Gobierno andaluz y consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Ramón Fernández-Pacheco, ha recalcado este jueves el apoyo de la Junta de Andalucía a la cooperativa Hortofrutícola Mabe tras el incendio de las instalaciones de la Las Norias de Daza, en El Ejido, que han acabado con la nave participada de unos 450 socios y con la que se generaban cerca de 1.200 empleos.
«A donde no llegue la aseguradora estará la Administración Pública para poder echar una mano», ha manifestado el portavoz en El Ejido (Almería), donde en la tarde de este miércoles visitó la zona acompañado por el alcalde de la localidad, Francisco Góngora, y sus respectivos equipos.
El portavoz ha especificado que, según han trasladado los cuerpos policiales, la investigación aún sigue abierta para determinar el origen de las llamas que en la tarde de este miércoles seguían latentes, de forma que el Consorcio de Bomberos del Poniente seguían con las labores de extinción ante un «amasijo de hierros» y «cenizas». «Confiamos en que dentro de poco podamos saber cuál es el origen», ha comentado.
«Me consta que desde el Ayuntamiento de El Ejido se están acelerando todo lo posible los trámites necesarios para que, una vez que los seguros, la policía y los bomberos así lo autoricen, poder proceder a la demolición de la nave, garantizando así también la seguridad de todas las personas», ha añadido Fernández-Pacheco.
El consejero ha lamentado el «terrible» incendio que «ha arrasado prácticamente toda la infraestructura«, por lo que se ha mostrado «del lado de la gente que lo pasa mal y que está sufriendo» y ha certificado su compromiso en «acelerar todos los procesos necesarios para que Mabe y esos 550 agricultores, así como los diferentes socios que la integran, pues puedan retomar la actividad lo antes posible», para lo que se analizarán también las ayudas recibidas.
De igual modo, ha valorado la reacción del resto del sector ante esta «desgracia», al haber «arrimado el hombro» y haberse mostrado «dispuesto a ayudar» para que «el fuego no acabe con el sueño y la aspiración de un proyecto que sin duda es bonito, que estaba funcionando muy bien y que tiene que seguir en el futuro».
«El presidente de Mabe nos contaba ayer que han sido muchísimas las empresas cooperativas, la propia Coexphal por supuesto, las que han puesto a su disposición sus instalaciones y su personal técnico con el objetivo de que el proyecto de Mabe no decaiga», ha destacado.
