El secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, ha afirmado que el Gobierno avanzará en la reducción de la jornada laboral para llevar el tiempo de trabajo de las 40 horas semanales a las 37,5 horas para 2025 solo con sindicatos, tras la posición «muy decepcionante» de la patronal española. Trabajo negociará la reducción de jornada solo con UGT y CCOO, pero deja la puerta abierta a CEOE. No obstante, Pérez Rey ha afirmado que esto no implica que la CEOE deje de ser convocada para las próximas reuniones, que se están realizando de manera semanal, y ha dejado abierta la puerta a que CEOE y Cepyme continúen en la mesa de negociación.
Trabajo negociará la reducción de jornada solo con UGT y CCOO, pero deja la puerta abierta a CEOE
«Nosotros hemos convocado y vamos a convocar también a la patronal a la mesa del próximo lunes. Que vengan o no vengan es una decisión que solo les corresponde a ellos; obviamente creo que deben estar en esa mesa y que deben de alguna manera reflexionar sobre cuál es esta actitud», ha añadido.
Así, ha confirmado que seguirán negociando el texto para reducir la jornada con las organizaciones sindicales, ya que hay todavía algunos elementos de carácter técnico que «pulir» y que se quieren cerrar con los sindicatos.
«Nuestro objetivo es ahora pulir un texto, pero insisto, con las organizaciones sindicales, que son las que han mostrado predisposición a hacerlo, pero si la patronal de aquí a la semana que viene recapacita, (…) pues bienvenidos serán», ha trasladado Pérez Rey tras la reunión de este lunes con agentes sociales.
Así ha respondido el ‘número dos’ de Yolanda Díaz, después de que se cumpliera el plazo de una semana que el Ministerio de Trabajo dio a la patronal para que presentaran propuestas por escrito para reducir el tiempo de trabajo.
Reducir legalmente la jornada a 37,5 horas
Pérez Rey ha asegurado que la patronal ha mantenido su postura y no ha presentado propuestas ni alternativas durante la reunión y que, incluso, ha cuestionado el objetivo del Gobierno de reducir legalmente la jornada a 37,5 horas. «La postura de la patronal ha dejado mucho que desear, ha sido claramente decepcionante», ha lamentado.
Para Pérez Rey, la posición de la CEOE está lastrada «por la ideología» más que por la «democracia» y advierte de «lastres políticos» en la decisión de la patronal sobre reducir la jornada para adecuarla a las empresas a las que representa.
De igual manera, ha acusado a CEOE y Cepyme de «burlar» la mesa de diálogo social y la democracia con su postura de «descuelgue», tras casi seis meses de esfuerzos invertidos en negociar la reducción del tiempo de trabajo sin merma salarial.
«Yo no pierdo la esperanza de que puedan hacer un favor a las empresas a las que representan y poner propuestas concretas encima de la mesa», ha añadido.
EL TEXTO SE TRAMITARÁ COMO UN ANTEPROYECTO DE LEY
Al ser preguntado por los plazos, Pérez Rey ha afirmado que la reducción de jornada se tramitará como un anteproyecto de ley y que se intentará llevar el texto para su tramitación parlamentaria «cuanto antes», pero ha avisado de que todavía hay que realizar trabajo sobre la propuesta que está encima de la mesa.
De igual manera, ha indicado que el próximo lunes será la última reunión o no de la mesa, en función de cómo avancen con las organizaciones sindicales para pulir los aspectos técnicos del documento que está encima de la mesa y también, en función de si la patronal mueve su posición o no, aunque ha reconocido que es «escéptico» a que lo haga.
En esta línea, ha recalcado que la intención de la patronal en relación a suplir a través de horas extraordinaria la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas, es una «estafa» que desde el Gobierno no van a permitir. «Esta es una negociación seria», ha subrayado.
De igual manera, ha afirmado que el Gobierno quiere que esta no sea una «medida elitista» y llegue a todos los sectores y no solo a aquellos que tiene jornadas ya reducidas.
«El Gobierno no plantea reducir la jornada de los que ya la tienen reducida (…), sino para que la puedan disfrutar aquellas personas que hoy trabajan jornadas de 40 horas», ha subrayado.
SINDICATOS CREEN QUE NO HARÁ FALTA MUCHAS MÁS REUNIONES PARA EL ACUERDO
Por su parte, el vicesecretario General de Política Sindical de UGT, Fernando Luján, ha afirmado que el texto que les remitió Trabajo es «suficiente» para cumplir los objetivos principales de los sindicatos en relación a reducir la jornada y el registro horario, por lo que no serían necesarias muchas más reuniones sobre la materia.
Además, Luján ha reiterado, junto al adjunto a la secretaría de Acción Sindical y Empleo de CCOO, Raúl Olmos, que el acuerdo para la reducción de la jornada laboral debe realizarse este mes e insisten en que les gustaría que fuera un acuerdo tripartito.
«Estábamos en disposición de poder intentar alcanzar un acuerdo tripartito dejándonos alguna pluma en la gatera si era necesario», ha afirmado Olmos, que ha insistido en que «ya es hora» de reducir la jornada.
«Ha llegado ya la hora de reducir el tiempo de trabajo. Se nos ha agotado el tiempo. Tiene que salir este mes, con acuerdo de la patronal o sin acuerdo con la patronal», ha sentenciado el responsable de UGT.
Replantear la postura
Asimismo, Luján ha apelado a la CEOE a que repiense su postura y tenga en cuenta la recomendación de la OCDE de que sería bueno para la productividad española que esta reducción del tiempo de trabajo saliera del ámbito de la negociación tripartita en el que se encuentran sindicatos, empresarios y Gobierno.
«Le pido a la patronal que se sume de buena fe a negociar una medida que es buena para las empresas, que es buena para las personas trabajadoras y que es buena para nuestro país. Le tiendo la mano para que seamos nosotros los que negociemos de buena fe con un objetivo claro», ha insistido.
En relación a los aspecto a pulir, ambos sindicalistas han indicado que todavía no se han abordado nada del texto porque se estaba esperando que la CEOE clarificara su postura.
Asimismo, al ser preguntados por los plazos, desde CCOO han indicado que es poco probable que el texto pueda tramitarse en el Congreso de los Diputados antes de julio, pero ven posible que llegue en septiembre.
