Si en la jornada de este martes pasea por Málaga y se encuentra un revuelo de efectivos de los diferentes Cuerpos de Seguridad del Estado y de técnicos de emergencia sanitaria, no se preocupe. No habrá ocurrido nada de gravedad, solo que durante unas horas la ciudad se estará preparando ante la posibilidad de que pueda producirse un posible terremoto de magnitud 5,8 en la escala de Richter.
Todo ello con el objetivo de poner a prueba la operatividad del Plan de Actuación Local ante Riesgo Sísmico en la capital, además de “coordinar las acciones de los distintos operativos de emergencias en situaciones de crisis”, así como “verificar la capacidad de respuesta ante un terremoto y sus réplicas, incluyendo la atención a víctimas y la evaluación de infraestructuras dañadas”, según ha explicado el Ayuntamiento de Málaga en un comunicado.
De esta forma, efectivos de Policía Local, Real Cuerpos de Bomberos, Protección Civil, Cuerpo Nacional de Policía, Guardia Civil, Cruz Roja, 061, Delegación de Salud, Instituto de Medicina Legal, técnicos de varios colegios profesionales y personal de distintas áreas y empresas del Consistorio de la ciudad participarán en este simulacro sísmico.
Casi seis horas de simulacro
Así, desde las 8.00 y hasta las 13.30 horas se realizará este ejercicio práctico que supondrá la puesta en marcha del Plan de Emergencia Municipal (PEM) y la movilización de toda la estructura operativa, tal y como se haría en una situación de terremoto real. Este operativo estará conformado tanto por miembros del Comité de Operaciones, como del Comité Asesor en el Centro Municipal de Emergencias, además del Gabinete de Información y un Puesto de Mando Avanzado.
Durante las cerca de seis horas en las que se prolongará el simulacro, se sucederán llamadas de emergencia, la activación del Plan de Emergencia Municipal, así como evaluaciones de daños, evacuaciones de un centro educativo y ejercicios de rescate en distintas zonas de la ciudad. Asimismo, se instalará un Puesto de Mando Avanzado (PMA) y un hospital de campaña, que se ubicará en el recinto ferial de Cortijo de Torres, con la finalidad de que este ejercicio afecte lo menos posible al tráfico y a la movilidad de la ciudad, tal y como han informado desde el Ayuntamiento.
Cruz del Humilladero: la zona más afectada del simulacro
El simulacro recreará un movimiento sísmico con una magnitud de 5,8 en la escala Richter —lo que se consideraría un terremoto moderado— que se produce en la ciudad a las 8.00 horas. Con el epicentro en la zona sur-oeste, y teniendo lugar a una profundidad de 30 kilómetros y un grado de intensidad 6 de 12, el movimiento tendría unos 30 segundos de duración —con sus posteriores réplicas de baja intensidad— y afectaría en mayor medida a la zona cerca al epicentro, que en este caso sería la barriada de Cruz del Humilladero.
En este supuesto los daños registrados serían de carácter leve y moderado en un número importante de edificaciones, en las que ninguna habría colapsado de producirse este terremoto. Sin embargo, la caída de cascotes sobre vehículos y peatones habría provocado seis víctimas mortales, cinco graves y cinco leves.
Situaciones recreadas
A partir de este supuesto, las situaciones simuladas por los diferentes efectivos de emergencia serían la inspección de zonas afectadas, la retirada de mobiliario urbano, el desalojo de un instituto tras una réplica del seísmo, la realización de una excarcelación de un autobús de la EMT, la evaluación de edificaciones dañadas a causa del seísmo, la afectación sísmica en el aeropuerto, la identificación de cadáveres, la realización de reanimación cardiopulmonar (RCP), la búsqueda e inmovilización de personas desaparecidas en estructuras colapsadas o la inspección de la Unidad de Subsuelo del Cuerpo Nacional de Policía.
Con motivo de la realización de este simulacro, el Ayuntamiento ha editado vídeos que serán difundidos en las pantallas de los autobuses de la EMT y en mupis y marquesinas para informar a la ciudadanía sobre el ejercicio práctico, además de incluir consejos sobre cómo debe actuarse en caso de producirse un episodio sísmico.
Asimismo, tal y como apuntan desde el comunicado emitido por el Consistorio, en caso de que se produjese una emergencia real durante la realización de este ejercicio “se pondría fin al simulacro”.