En un contexto de crisis económica en el que la Universidad de Málaga espera como “agua de mayo” un inminente rescate de la Junta de Andalucía -estimado en unos 48 millones de euros para sanear sus cuentas- el equipo de Gobierno de la UMA se ha llevado una grata sorpresa al descubrir que poseen unos terrenos frente al aeropuerto, que llevan en desuso más de cuarenta años.
Según ha podido conocer 101 Televisión, se trata de unos terrenos ‘olvidados’ que forman una finca de eucaliptos de 45.000 m² próxima al aeropuerto, que venía añadida al lote de la herencia que Grice-Hutchinson donó a la Universidad de Málaga para investigación, y que tuvo como condición, la venta para la universidad de esta parcela que la institución tuvo a bien adquirir. Unos terrenos que el actual equipo de Gobierno ha descubierto recientemente que tenía.
Según ha podido conocer 101 Televisión, se trata de unos terrenos ‘olvidados’ que forman una finca de eucaliptos de 45.000 m² próxima al aeropuerto
“En la labor de control del desbroce de todos los terrenos que la Universidad posee en los campus, apareció el desbroce de una finca en un lugar que no determinábamos dónde se encontraba. Y lo que hicimos es ir a visitarla y encontramos que esa finca está justo, entre la avenida Velázquez y las vías del tren, en la zona frente al aeropuerto. Y ahí fue donde ya empezamos a ver qué posibilidades tenía”, añade en conversaciones con este medio, el vicerrector Infraestructuras y Sostenibilidad de la UMA, Salvador Merino.
¿Quién fue Grice-Hutchinson, la economista que donó su herencia a la UMA?
La finca está compuesta por unos terrenos que, unas décadas atrás, se inundaban con el paso del río Guadalhorce por lo que en su momento se plantaron eucaliptos, ya que es una especie arbórea que seca los terrenos. Años después, añade Merino, ”tras el encauzamiento del Guadalhorce, y ya con los terrenos secos, la única intención que tenemos nosotros en la finca es ponerla a disposición de la ciudad como playa de aparcamiento para el aeropuerto”.
A la espera de los permisos del Ayuntamiento
A tenor de este descubrimiento, Salvador Merino considera que al tratarse de una zona donde la Universidad no tiene zona educativa, “por lo menos usémosla a beneficio propio como canon de reversión a empresas que estén interesadas en la explotación de un alquiler para aparcamiento y poder sacarla a concurso para que estas empresas participen”.
Con este panorama con el que la universidad pretende conseguir una inyección económica para sus arcas, la UMA ha presentado estas pasadas semanas al Ayuntamiento de Málaga toda la documentación pertinente con el fin de obtener ese permiso que permita el uso de esa extensión de terreno, como playa de aparcamientos para el aeropuerto.
Merino afirma que “ya depende del Ayuntamiento” y que en el momento que se otorgue el permiso provisional, comenzaran el trámite para poder preparar el concurso. Desde la UMA esperan que la resolución del trámite esté lista para el primer tramo del año 2025 “porque ya está muy avanzada toda la negociación con el Ayuntamiento, y la concejalía de Urbanismo que ha prestado toda su colaboración”.
