La semana pasada, del 2 al 9 de diciembre, la Policía Local de Málaga ha tramitado un total de 57 denuncias a establecimientos y a personas por incumplimientos relativos a la ordenanza de prevención y control de ruidos y otros relacionados con las medidas municipales que garantizan la convivencia ciudadana y la protección del espacio público.
Dos de las intervenciones se han producido con motivo del lanzamiento de petardos en vía pública, justo uno de los aspectos recogidos en el bando emitido por el Ayuntamiento para que reine la convivencia durante la Navidad.
Los agentes han desarrollado en este periodo un total de 157 intervenciones en la zona del Centro Histórico y en los distritos de Teatinos y Carretera de Cádiz, de las que 57 acabaron en denuncia.
Además, en el marco del dispositivo policial extraordinario de vigilancia contra el intrusismo en el servicio de transporte público, de control de VTC y de taxis, se han llevado a cabo 59 actuaciones que se han saldado con cuatro denuncias a VTC.
También destacan las 34 actuaciones de vigilancia para detectar la prestación del servicio de transporte de viajeros careciendo de autorización.
Por otro lado, según informa el Ayuntamiento de Málaga, se han contabilizado 23 denuncias por permanencia y concentración de personas consumiendo bebidas en zonas no autorizadas, así como ocho por hacer las necesidades fisiológicas en la vía pública.
Además, también constan dos por dispensar bebidas alcohólicas para su consumo fuera del mismo y dos por explosionar artículos pirotécnicos en la vía pública sin autorización.
Multas desde 300 hasta 300.000 euros
En relación a las actuaciones sobre los establecimientos públicos, se han desarrollado 42 intervenciones. De las denuncias interpuestas destacan tres por carecer de licencia de apertura, autorización municipal o declaración responsable; dos por no tener toda la documentación exigida en regla, dos por no hacer el cambio de titular y dos por ocupación de la vía pública sin autorización.
Igualmente, también constan dos por trascender música al exterior; una por no ajustarse a la actividad autorizada en la licencia de apertura; y una por ampliar la actividad autorizada en la licencia.
Las denuncias relacionadas con la contaminación acústica pueden suponer una sanción administrativa cuyo importe oscila entre los 600 euros y los 300.000 euros (muy graves). Respecto a las relacionadas con la ordenanza de Convivencia Ciudadana, la sanción es a partir de los 300 euros.