La investigación policial de la Operación One Click, llevada a cabo por el Grupo de Investigación Tecnológica (G.I.T.) de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Granada, tuvo su origen en más de una veintena de denuncias recibidas en relación a la compra de entradas online para visitar el complejo monumental de Granada a través de dos plataformas.
Las denuncias informaban de la existencia de dos páginas web que ofertaban entradas online para visitar el monumento, las víctimas realizaban el pago de una o varias entradas utilizando tarjetas de crédito o débito, y recibían a continuación un correo de confirmación con un código QR. No obstante, al día siguiente o en días posteriores, volvían a recibir nuevos correos electrónicos en los que se les informaba de la cancelación de su visita debido a que la empresa se encontraba en un proceso de reestructuración interna y de preconcurso de acreedores. Sin embargo, los investigadores pudieron averiguar que esta empresa tuvo un beneficio neto superior a los 5.000 euros en el último ejercicio de 2.023.
Identificados por el TPV receptor
Los presuntos autores son dos ciudadanos de 44 años de edad y nacionalidad española que no poseen antecedentes policiales, quienes tras prestar declaración, han quedado en libertad con cargos, encontrándose a la espera de ser llamados para comparecer ante la autoridad judicial.
Los compradores, tras realizar el pago de las entradas con tarjeta de crédito o débito, recibían posteriormente correos electrónicos en los que se les anulaba la posibilidad de realizar las visitas por encontrarse la empresa en proceso de reestructuración interna y de preconcurso de acreedores no facilitando la devolución del importe ni compensación alguna. Por otra parte, en ninguno de los correos recibidos por las víctimas se les ofrecía la posibilidad de recuperar el dinero invertido en las entradas, ni el ofrecimiento de compensación alguna por estas circunstancias.
Los agentes durante el proceso de investigación pudieron determinar la inexistencia de la quiebra de dicha empresa, identificando a los presuntos responsables de la misma y titulares de la cuenta bancaria donde se recibían los pagos de la TPV virtual utilizada en las reservas de las entradas. Todas estas compras tuvieron lugar entre junio y octubre del presente año, por importes que oscilaban entre 24,95 y 260 euros.