El cierre del colegio San Ignacio de Loyola ha desataco la «incertidumbre» entre las familias y toda la plantilla de trabajadores de este centro educativo situado en el Polígono de San Pablo. Al parecer, el cierre del San Ignacio de Loyola acarrearía una reorganización del alumnado a otro centro público de la misma zona, el San Juan de Ribera. El cierre del colegio San Ignacio de Loyola provoca «incertidumbre» entre familias y docentes
Ante esto, según indica el sindicato Ustea Sevilla (Unión de Sindicatos de trabajadoras y trabajadores de Andalucía), este pasado lunes los familiares y docentes de ambos centros se concentraron a las puertas del colegio San Juan de Ribera exigiendo soluciones y saber qué ocurrirá con «el equipo humano» que trabaja en el centro.
El cierre del colegio San Ignacio de Loyola provoca «incertidumbre» entre familias y docentes
El sindicato Ustea Sevilla ha trasladado la «incertidumbre» de las familias y docentes de los centros públicos de San Juan de Ribera y San Ignacio de Loyola del Polígono de San Pablo, tras conocer la reorganización del alumnado por «el cierre del colegio San Ignacio de Loyola».
Este pasado lunes los familiares del alumnado se concentraron a las puertas del colegio San Juan de Rivera. Desde la organización sindical señalan que «la Delegación de Educación en Sevilla ha trasladado a los familiares que la ubicación del nuevo centro sería en las instalaciones hasta ahora ocupadas por dicho colegio».
Según ha informado Ustea en un comunicado, «la información recibida ha sentado como un jarro de agua fría entre la comunidad educativa del CEIP San Ignacio de Loyola, que con nueve unidades –tres de infantil y seis de primaria– y un número importante de alumnos con necesidades específicas de apoyo educativo», se encuentra en la «incertidumbre» de saber «qué será del equipo humano que trabajan hasta ahora con ellos».
Por su parte, la Ampa del colegio ha trasladado, en una reunión con el sindicato, su «satisfacción» con el trabajo de integración del alumnado que hace el equipo docente y especialistas en Pedagogía Terapéutica del colegio.
Deja en el aire la estabilidad de la plantilla
La unión de estos centros “deja en el aire aún la estabilidad de la plantilla con destino definitivo en cada colegio y supone la desaparición entre ambos de once puestos de plantilla de funcionamiento, ahondando en el recorte del empleo público docente», según Ustea.
Además, expresan «la incertidumbre» por el futuro uso del emplazamiento del solar, que al perder uso educativo regresaría a manos del Ayuntamiento de Sevilla».
Ustea Sevilla ha añadido que la bajada de natalidad «esgrimida por la Consejería para suprimir clases y docentes en la escuela pública no está afectando a la privada concertada, como se vio ya con la autorización el pasado curso de una segunda unidad de infantil de tres años en el colegio concertado La Salle-Felipe Benito en Macarena Norte, mientras recortaba una clase de tres años en el colegio público Teodosio, situado en la misma área».