A las 17.35 horas de este primer lunes de Cuaresma, se abrían las puertas de la Iglesia Conventual de San Gregorio, sede de la hermandad del Santo Entierro, para comenzar el traslado de ida a la Santa Iglesia Catedral del Cristo Yacente. Una jornada tradicional e histórica que hemos podido disfrutar en directo en 101tv. La obra de Juan de Mesa datada del año 1620, era la imagen que presidía el Vía Crucis de las Hermandades de Sevilla en la Santa Iglesia Catedral.
La calle Alfonso XII comenzaba a llenarse de fieles, muy pendientes del tiempo, minutos antes de que se abrieran las puertas del templo. Con el cielo aún encapotado, la hermandad del Santo Entierro ponía su Cruz de Guía en la puerta de San Gregorio tras conocer las predicciones meteorológicas de expertos, tal y como contaba el hermano mayor de la corporación del Sábado Santo, Fermín Vázquez, en los micrófonos de 101.
En menos de 30 minutos y con el cambio de itinerario que la hermandad había dado a conocer horas antes, las andas del Cristo Yacente entraban a la Santa Iglesia Catedral. A un ritmo acelerado, a las 18.09 horas llegaba a la Puerta de Palos de la SEO Metropolitana, situándose en la capilla Real a la espera del inicio del rezo del Vía Crucis. Pocos minutos después de concluir el traslado, comenzó a llover de forma abundante incluso dejando granizo a su paso en el centro de la ciudad. Unas precipitaciones que continuaron cayendo en la capital durante las siguientes horas.
Cruces penitenciales
Las puertas de la Catedral se abrían poco antes del inicio del rezo del Vía Crucis, que comenzó a las 20.00 horas. El rezo de las estaciones se ha realizado en el interior de la Seo Metropolitana por las hermandades encargadas, que en vez de portar sus cruces de guía, han participado con las cruces penitenciales que cedía la hermandad de la Trinidad a la corporación del Santo Entierro. Una decisión que había tomado el Consejo de Hermandades horas antes ante las inclemencias meteorológicas.
Sobre las 21.00 horas finalizaba el rezo de las estaciones del Vía Crucis, poniendo fin a este tradicional culto que cada año organiza el Consejo de Hermandades de Sevilla.
Sobre las 22 h. comenzaba el traslado de regreso a San Gregorio, a un ritmo bastante acelerado salía el cortejo que presidía al Señor por la Puerta de Palos de la Catedral. Realizando el mismo recorrido que de ida, es decir, el itinerario más corto, en tan solo 30 minutos los costaleros del Señor portaron las andas procesionales hasta la iglesia conventual de San Gregorio, para poner punto y final a un vía Crucis histórico de las hermandades de Sevilla.
A pesar de la celeridad de los traslados, las decisiones de la corporación y del Consejo de Hermandades, además del sobreesfuerzo de todas las personas que conformaban el cortejo, sobre todo el de los costaleros que portaban las andas del Señor, la lluvia ha respetado los traslados de ida y vuelta del Cristo Yacente y Sevilla ha podido disfrutar de un Vía Crucis completo.