La alcaldesa de Ronda, María de la Paz Fernández Lobato, ha expresado su preocupación por el grave problema de conectividad que afecta a la Serranía de Ronda tras el corte total de la carretera A-397, que une la ciudad con San Pedro de Alcántara y la Costa del Sol. En una entrevista concedida a Roberto López en el programa «Llegó la Hora» de 101 Televisión Andalucía, Fernández Lobato subrayó el impacto negativo que esta situación está teniendo sobre miles de ciudadanos y sobre la economía local.
Las recientes borrascas han provocado crecidas de ríos, cortes en carriles rurales y el desprendimiento de un muro en el Instituto Gonzalo Huesa. Sin embargo, el mayor problema ha sido el cierre de la A-397, una vía fundamental para la movilidad de la comarca. Según la alcaldesa, «este corte afecta a cerca de 9.000 personas que diariamente se desplazan a la Costa del Sol por motivos laborales y que ahora deben recorrer trayectos alternativos mucho más largos y costosos, lo que está afectando gravemente a familias y empresas».
La interrupción de esta conexión no solo está afectando a trabajadores y transportistas, sino que también impacta directamente en el sector turístico, uno de los motores económicos de Ronda. «Tenemos una vía constante de turismo entre la Costa del Sol y la Serranía, y este corte altera por completo el flujo de visitantes», explicó la alcaldesa, quien destacó la urgencia de restaurar la comunicación para evitar una caída en la actividad económica de la zona.
Ante esta situación, Fernández Lobato y otros alcaldes de la comarca han solicitado a la Junta de Andalucía que declare la obra de reparación como prioritaria y de emergencia. «Todos los alcaldes y alcaldesas de la Serranía nos reunimos sin distinción política para exigir una solución inmediata», afirmó.
A pesar de que la Junta ha calificado la obra como de emergencia, aún no hay una fecha exacta para su ejecución. «Primero se necesitan informes técnicos que determinen la magnitud de los daños y las actuaciones necesarias», explicó la alcaldesa. Mientras tanto, los conductores deben optar por rutas alternativas, como las carreteras de Gaucín o la de Ronda-Málaga, que ya están sufriendo un tráfico excesivo y grandes retenciones.
Fernández Lobato reiteró que este problema es un reflejo de una deficiencia estructural en las comunicaciones de la Serranía de Ronda. «Llevamos años demandando mejoras en nuestras infraestructuras. Ahora se hace más evidente que nunca la necesidad de una autovía que conecte Ronda con Málaga», subrayó.
Mientras se espera la reparación de la carretera, miles de ciudadanos continúan enfrentando dificultades diarias para desplazarse, con el consiguiente perjuicio económico y social. La alcaldesa ha insistido en que «la situación no solo afecta a Ronda, sino a toda la provincia, por lo que es imprescindible que se le dé una solución rápida y eficaz».
