El Teléfono de la Esperanza ha puesto en marcha un chat para ayudar a jóvenes que presenten ideas suicidas y autolesiones, de forma que ellos mismos; así como familiares, amigos y educadores de estos adolescentes tengan acceso a contenidos relacionados con la prevención.
El presidente de la entidad, Juan Sánchez, ha explicado a Europa Press que esta iniciativa, denominada ‘El chat de la Esperanza’, surgió porque, aunque en 2021 las consultas telefónicas crecieron un 48,20% respecto a 2020, hasta las 26.745 llamadas, «detectamos que las de jóvenes de 18 a 30 años eran minoritarias», de hecho, «no se registró ninguna de adolescentes de 14 a 17 años».
Analizando estas cifras, «pensamos que posiblemente era porque los jóvenes a esas edades no llaman por teléfono sino que interactúan más a través de chat», ha asegurado Sánchez, por lo que se ideó la puesta en funcionamiento de este chat para ofrecer su servicio de orientación en el medio de comunicación que más utilizan jóvenes y adolescentes.
«La idea era que de manera inmediata pudiéramos atender los miedos o las angustias de estos jóvenes que están sufriendo un momento de crisis», ha señalado el presidente de la entidad, quien ha manifestado que es una herramienta que por el momento ha empezado solo en la provincia de Málaga «como centro piloto».
Sánchez ha destacado que desde que el día 21 de marzo cuando se puso en funcionamiento ‘El Chat de la Esperanza’ ya han realizado varias atenciones, con lo que «nos hace pensar que estamos desarrollando una herramienta útil e importante». Para acceder es necesario descargar la aplicación ‘Conéctate.social’, disponible en Google Play y Apple Store.
Además, ha afirmado que está previsto que voluntarios de la entidad acudan a centros de educación para divulgar el servicio que ofrecen en la ‘app’. El objetivo de esto es trabajar con el alumnado en la sensibilización sobre conductas suicidas y autolesivas, haciendo hincapié de la importancia de pedir ayuda y expresar los sentimientos.
También se pretende llegar a los familiares «para que sepan los recursos con los que cuentan, que puedan detectar cuando hay conductas autolíticas y que sepan el perfil del jóvenes que esté en esta situación», ha indicado el presidente de la entidad, quien ha apuntado que, además, se desarrollarán actividades y campañas de sensibilización.
Un equipo de profesionales del Teléfono de la Esperanza ha formado desde octubre pasado a voluntarios, «sobre todo jóvenes», a través de cursos de intervención en crisis, desarrollo personal y prevención del suicidio, contando con la colaboración de Lucía Pérez, psiquiatra de la Unidad de Gestión Clínica de Salud Mental del Hospital Regional Universitario de Málaga.
Sánchez ha indicado que esta formación, que «no parará, sino que será continua», se ha centrado en que los voluntarios puedan informar sobre «cuáles son los tabúes, los mitos» y puedan dar respuesta a jóvenes «que tengan ideas suicidas y problemas como ‘bulling’, maltrato, abusos o cuestiones de identidad sexual». La iniciativa se ha puesto en marcha gracias a una ayuda concedida en el Festival ‘Soles de Málaga’ organizado por Fundación El Pimpi.
