El Málaga CF ha confirmado lo que era un secreto a voces si se perdía en Girona: la destitución de Natxo González como técnico malaguista. El vitoriano tomó las riendas del equipo tras la salida de José Alberto López, pero en las 10 jornadas disputadas bajo su cargo, no ha logrado invertir la dinámica negativa que atraviesa la entidad de Martiricos.
Una victoria, tres empates y seis derrotas es el bagaje que deja Natxo. El triunfo llegó a domicilio ante la SD Amorebieta y, después, solo tropiezos. Tres seguidos concretamente. Un factor clave que ha hecho insostenible la estancia del vitoriano en Málaga.
Lo ha probado todo. Pero no ha dado con la tecla. Ni a la hora de gestionar el vestuario, ni sobre el terreno de juego. Sin plan B, Natxo abandona Málaga con apenas seis puntos sumados de los 30 disputados. Tomó las riendas del equipo con 31 unidades, y lo deja diez partidos después con 37.
La afición exculpó al vitoriano de gran parte de los males endémicos del equipo. Sin embargo lo mostrado en Fuenlabrada y en La Rosaleda ante el Huesca ha acabado con el crédito de un Natxo que se encontró un vestuario dividido y que en ningún momento ha podido unir.