La electricidad ha comenzado a restablecerse en múltiples zonas de Málaga tras el apagón general que afectó a toda la península ibérica desde las 12.30 horas de este lunes. La recuperación del suministro ha supuesto un respiro para una ciudad que durante horas vivió escenas de gran incertidumbre, hasta el punto de activar el Plan Municipal de Emergencias. Lugares como el barrio de la Victoria, Limonar, El Cónsul, Torre Atalaya, Cerrado de Calderón o el polígono Guadalhorce han retomado la normalidad, aunque lo cierto es que todavía quedan muchas zonas sin luz.
La situación llevó al Ayuntamiento de Málaga a reforzar todos los dispositivos de seguridad. Los turnos de los servicios policiales se duplicaron para atender la oleada de incidencias, entre ellas numerosos casos de personas atrapadas en ascensores debido a la falta de electricidad.
El centro de Málaga fue uno de los focos más afectados y ofreció algunas de las imágenes más llamativas de la jornada, con los negocios paralizados. La actividad comercial quedó totalmente paralizada: los clientes no podían pagar con tarjeta y muchos negocios no lograron bajar sus persianas eléctricas. No tenían manera de cobrar ni de proteger el local; solo quedaba esperar.
Directo y última hora del apagón eléctrico histórico afecta a España y parte de Europa
Mientras tanto, las paradas de autobuses se abarrotaban de ciudadanos que aguardaban sin información clara sobre la reanudación del transporte público. La circulación en la ciudad colapsó por el apagón de los semáforos, provocando retenciones en las principales vías y aumentando la confusión en un contexto ya de por sí complicado. Además, el servicio de trenes también quedó suspendido, dificultando aún más la movilidad.
Aunque la normalización del suministro avanza progresivamente y muchos barrios ya han recuperado la luz, las autoridades locales piden a la población extremar la precaución en los desplazamientos y seguir las instrucciones oficiales. Red Eléctrica de España mantiene activos sus protocolos de emergencia para garantizar la estabilidad total de la red en las próximas horas.
Ahora, una vez superado el momento más crítico, queda pendiente evaluar los daños causados en la ciudad -tanto a nivel de infraestructuras como en el tejido económico local- y esperar a conocer los motivos exactos que desencadenaron el apagón, un fallo que, según los expertos, no tiene precedentes recientes en el sistema eléctrico peninsular.