- En el último año la plantilla se ha reducido casi un 6%, pasando de 187 a 176 profesionales en total en los centros sanitarios y hospitales de la provincia
- El sindicato señala que las incorporaciones han sido prácticamente nulas en los últimos años y recuerda que desde 2018 sólo se han convocado 74 plazas para toda Andalucía
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios, CSIF, en Málaga, denuncia que el déficit de fisioterapeutas en la sanidad pública en la provincia sigue agravándose y señala que los centros sanitarios y hospitales malagueños apenas cuentan actualmente con 176 profesionales de esta categoría en total, lo que se traduce en uno por cada diez mil habitantes.
Esta deficiente dotación de plantilla es resultado de un paulatino descenso en las incorporaciones de profesionales a través de las distintas ofertas de empleo público del Servicio Andaluz de Salud –SAS-. En la última convocatoria, correspondiente a 2021, sólo se incluyeron 14 plazas de fisioterapeuta para toda Andalucía, la menor cifra registrada en los últimos cuatro años: en 2020 se convocaron 19 plazas; en 2019, 16; y en 2018, 25.
En conjunto, desde 2018 el SAS ha convocado 74 plazas de esta categoría para todas las provincias, una cifra que provoca que la ya reducida plantilla de profesionales siga menguando. Así, en apenas un año, la plantilla total de fisioterapeutas del SAS para la provincia de Málaga se ha reducido un 6%, pasando de los ya escasos 187 profesionales que había en 2021, a los 176 actuales.
Estas cifras sitúan a la provincia cada vez más lejos de alcanzar la ratio recomendada por la Organización Mundial de la Salud, OMS, de un fisioterapeuta por cada mil habitantes, según la cual el SAS necesitaría incorporar 1.533 profesionales más en la provincia, o lo que es lo mismo, necesitaría multiplicar por 8,7 la plantilla actual.
CSIF muestra su preocupación por el cada vez mayor colapso de la atención rehabilitadora y fisioterapéutica en la sanidad pública de cara al Día Mundial de la Fisioterapia, que se celebra el próximo 8 de septiembre. El sindicato destaca el papel fundamental que desarrollan estos profesionales en los procesos de recuperación y de tratamiento de enfermos crónicos, mejorando notablemente la calidad de vida de los pacientes, y reclama una adecuada dotación de profesionales.
Fisioterapia en los centros de salud y hospitales
Además de la alarmante falta de profesionales, la atención fisioterapéutica en el SAS adolece de una muy deficiente gestión, al no estar diferenciada en la práctica la atención hospitalaria de la atención en los centros de salud. Esto provoca que los pacientes, independientemente del tipo de dolencia que padezcan, tengan que recorrer un circuito administrativo interminable y confuso hasta ponerse en manos del fisioterapeuta. Cuando este profesional comienza el tratamiento, tras meses de espera, el paciente ha empeorado y en muchas ocasiones requiere nuevas valoraciones e incluso intervenciones quirúrgicas, que podrían haberse evitado.
CSIF defiende que esta diferenciación es esencial para mejorar la asistencia fisioterapéutica en el SAS, y señala que debe ir inevitablemente acompañada de una mayor dotación de personal, tanto en hospitales como en Atención Primaria. El sindicato estima que cada centro de salud debería disponer de asistencia fisioterapéutica tanto en horario de mañana como de tarde, para agilizar la atención. De esta forma, pacientes con dolencias no consideradas graves evitarían tiempos de espera desorbitados, que llegaron a alcanzar los quince meses en Málaga hace un año.
La central sindical denuncia que las plazas convocadas de esta categoría por el SAS son del todo insuficientes para prestar una atención digna a la ciudadanía y empeoran la situación de colapso y de ineficiencia que sufre este servicio, por lo que exige ofertas públicas de empleo acordes a la demanda asistencial. Por ello, CSIF reclama una mayor dotación de profesionales para atajar las grandes demoras, los retrasos injustificables en la aplicación de tratamientos y la saturación en centros de salud, que provocan que las personas usuarias tengan que recurrir a la sanidad privada.
