España tiene previsto desplegar aviones cazas del Ejército del Aire y del Espacio en Bulgaria y Rumanía en los próximos dos meses para realizar funciones de policía aérea, según han confirmado fuentes del Ministerio de Defensa.
La Fuerza Aérea española participa desde hace años en la misión de la OTAN de policía aérea del Báltico para impedir la intrusión de aeronaves sin identificar, especialmente aviones rusos que se acercan al espacio aéreo de la Alianza sin cumplir con las normas de vuelo internacionales.
Esa misión ya se amplió el pasado año a Rumanía para patrullar el Mar Negro y a principios de este año hubo un inédito despliegue en Bulgaria para ejercer la misma misión sobre su espacio aéreo.
Hasta ocho aviones Eurofighter del Ejército del Aire volverán el próximo 1 de noviembre a Bulgaria para una nueva colaboración de patrulla aérea, según ha revelado el Ministerio de Defensa búlgaro y confirmado después el español.
Además, en el mes de diciembre el despliegue tendrá lugar en Rumanía para una operación similar, en plena tensión de la Alianza con Rusia debido a la invasión de Ucrania que inició el pasado mes de febrero.
En 2023, el esfuerzo de España en las misiones de policía aérea se ha redoblado respecto a años anteriores, desplegando hasta ahora en tres países (Bulgaria, Lituania y Estonia) con el mayor número de cazabombarderos aportados hasta la fecha. A ellos se suman los nuevos despliegues, de nuevo en Bulgaria y el posterior en Rumanía.
Las tres primeras misiones se saldaron con un total de 38 misiones de interceptación real de aeronaves que no cumplían con las normas internacionales de vuelo, todas rusas, según informaron a Europa Press fuentes del Estado Mayor de la Defensa.
Cuando una de estas aeronaves es detectada, suena la alarma en la base de referencia y los cazas deben estar en vuelo en menos de 15 minutos para garantizar la soberanía del espacio aéreo.