La Dirección del Hospital Regional Universitario de Málaga reducirá la lista de espera con la implicación y coordinación de los servicios de Anestesiología y Reanimación y Cuidados Intensivos, en colaboración con los servicios quirúrgicos e intervencionistas.
En el contexto de un plan de eficiencia para la mejora del bloque quirúrgico, una de las medidas es la estrategia conjunta de los servicios de Anestesiología y de UCI «que permitirá que el complejo hospitalario incremente en torno a 100 pacientes mensuales intervenidos bajo anestesia general a la vez que también aumentarán los pacientes sometidos a procedimiento bajo sedación», han indicado desde la Junta en un comunicado.
Ambos servicios que ya trabajaron planes conjuntos para atender a los pacientes con COVID en las olas más críticas de la pandemia han evaluado la situación junto a la Dirección del centro y han reorganizado una parte de la atención. En concreto las sedaciones para determinadas pruebas diagnósticas en áreas fuera del quirófano, ya que el complejo dispone de experiencia al respecto como en el área de endoscopias digestivas. Se trata de una medida transitoria mientras las circunstancias lo requieran.
En la actualidad, el servicio de Anestesiología realiza sedaciones en áreas externas al quirófano, procedimiento que es realizado de manera habitual también por intensivistas en su labor diaria.
La Dirección del centro sanitario, ante la necesidad de incrementar su actividad quirúrgica sin mermar la actividad relacionada con las sedaciones, ha consensuado junto a los responsables de los servicios de Anestesiología y UCI que los profesionales de este último servicio, los intensivistas, sustituyan a los primeros en aquellos procedimientos realizados con sedación, y así poder incrementar el número de pacientes intervenidos bajo anestesia general por los especialistas en anestesiología.
En este sentido, los intensivistas se ocuparán de sedaciones para pruebas diagnósticas y/o terapéuticas como endoscopias digestivas, broncoscopias, pruebas de radiodiagnóstico y de radiología intervencionista que requieran sedación, hemodinámica, etcétera. Técnicas para las que están plenamente capacitados y cualificados y de las que en numerosas ocasiones se encargan médicos especialistas no anestesistas, como digestivos o facultativos del servicio de Urgencias.
Han recordado, asimismo, que la medicina intensiva es una especialidad dedicada al suministro de soporte vital de pacientes críticos que también requieren supervisión y monitorización intensiva. Además, la sedación forma parte del programa formativo de la especialidad de medicina intensiva y de su actividad diaria.
Los hospitales General, Materno Infantil y Civil hacen cada año más 27.400 intervenciones quirúrgicas, lo que arroja una media de 75 intervenciones al día. El número total de operaciones se divide en las 9.440 programadas, 6.000 a través de urgencias y 11.970 de cirugía mayor ambulatoria.
Por último, la Dirección del Hospital Regional Universitario de Málaga agradece a los servicios implicados el compromiso con la actividad de los hospitales del complejo y con la ciudadanía malagueña, aportando soluciones que mejoran la gestión eficiente de los recursos propios, así como el compañerismo demostrado con las unidades y servicios que han de dar respuesta a sus pacientes.