El consejero de Seguridad y portavoz del Gobierno de Canarias, Julio Pérez, ha anunciado este miércoles que a comienzos de enero se iniciará la «desescalada» de restricciones en La Palma tras el cese de la actividad volcánica en Cumbre Vieja, donde se mantiene una zona de exclusión y hay casi 7.000 personas evacuadas.
Así lo ha expuesto en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno en la que ha apuntado que «la situación es la misma» que en los últimos días, con el semáforo rojo de emergencia en vigor y un «problema de gases que subsiste», especialmente en la zona sur.
De hecho, ha comentado que el comité científico se reúne diariamente pero no el director, que lo hace de manera más espaciada –este jueves sí habrá una cumbre de ambos comités–.
Pérez ha señalado también que se mantienen los trabajos en la zona de La Laguna para abrir un tramo de una colada y recuperar una vía de comunicación pero las temperaturas «son más altas» y se está haciendo con «mucha cautela».