Esta victoria supone una bomba de oxígeno para el equipo veleño, que podría haber caído a los puestos de descenso de no haber logrado ganar.
El Vélez logra romper su mala racha de cinco partidos seguidos perdiendo con un triunfo vital frente al filial del Cádiz por 4-1. Esta victoria supone una bomba de oxígeno para el equipo veleño, que podría haber caído a los puestos de descenso de no haber logrado ganar. Los blancos se volvieron a reencontrar con su mejor versión en casa, en el Vivar Téllez, y disfrutaron con una goleada balsámica. El partido se les puso pronto de cara al conjunto axárquico con un tanto de Rafa Salama al minuto 14. Y antes de llegar a la primera media hora de juego consiguieron el 2-0 gracias a Zamorano, que convirtió un penalti a favor. En la segunda parte llegó el 3-0 por medio del máximo anotador del equipo, el mediapunta Luismi. Ahí se relajaron un poco los veleños, que encajaron el 3-1 por culpa de un error defensivo que aprovechó el Cádiz Mirandilla.
Pero fue una aviso y luego no volvieron a concender más oportunidades al conjunto amarillo, que se resignó y encajó el 4-1 definitivo por parte del delantero del Vélez, Álvaro Montejo, que redondeó una buena tarde de fútbol para los aficionados veleños. Con estos nuevos tres puntos el Vélez se queda en la undécima posición de la clasificación en el grupo 4 de 2ª RFEF con 5 puntos de ventaja sobre la zona de descenso y a cinco del ‘play off’ de ascenso a falta de 9 jornadas para el final. Su siguiente encuentro será el derbi malagueño frente al Antequera, el líder indiscutible de la Liga. Será a partir de las 17.00 horas en El Maulí el próximo domingo.