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Sindicatos sanitarios critican las políticas de contratación en los hospitales públicos de la provincia de cara al verano

El Sindicato Médico de Málaga (SMM), la Unión General de Trabajadores (UGT), la Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF) y Comisiones Obreras (CCOO) han hecho públicas este viernes sus críticas respecto a las políticas de contratación de personal del Servicio Andaluz de Salud (SAS) de cara a la temporada estival en los hospitales públicos de la provincia, con referencias al Hospital Regional de Málaga y al Hospital Clínico, entre otros.

Así, en un comunicado de prensa, UGT acusa al SAS de «seguir castigando a la sanidad pública de Málaga con una drástica reducción de contratos», y añaden que, tras un estudio de los datos referentes a la cobertura de 2023, «se visualiza que solo se van a realizar 44.169 jornadas de trabajo para repartir entre todas las categorías del SAS, el año pasado se realizaron 71.959 para las contrataciones de verano. Esto traducido a contratos de vacaciones resulta que solo se harán 480 frente a los 782 del año anterior».

Además, y de forma concreta, el sindicato alude al plan de vacaciones del Hospital Regional de Málaga destacando que «pasa por recortar la contratación y por el cierre de camas con la excusa de que van a adecentar los servicios, se cerrarán plantas enteras, medias plantas y así se notará una drástica reducción de la actividad quirúrgica y de consultas».

«Este agotamiento físico y mental al que les lleva el SAS supondrá sin lugar a duda poner en riesgo la salud de los pacientes y un aumento en las listas de espera», apuntan desde UGT, a la vez que detallan datos sobre listas de espera, tales y como que en Neurología van por un año; en Neurocirugía, por 14 meses; en colonoscopias por vía normal, por ocho meses, y en preferentes, por cuatro meses; en Traumatología, por ocho meses; que en Estudio del sueño hay usuarios esperando desde 2018; y que en Digestivo, los pacientes vistos en Urgencias y que son derivados a la consulta van por cuatro meses.

Por su parte, el sindicato de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Málaga ha anunciado que va a iniciar movilizaciones la próxima semana «ante la falta de personal para cubrir las bajas y las sustituciones en los meses de verano en los hospitales de la provincia».

Par este sindicato la situación es «crítica» y con las protestas pretenden exigir la contratación urgente de profesionales sanitarios de todas las categorías.

Por otro lado, en un comunicado el CSIF alerta del «complicado verano que afrontará la sanidad pública en la provincia por la falta de contratación para cubrir las vacaciones de los profesionales», y señalan que «el recorte en la oferta de contratos del plan de verano del SAS supondrá cierres de servicios y actividad generalizados».

Al respecto señalan que en el caso del Hospital Regional «van a ser masivos», con lo que, a juicio de CSIF, «no podrá garantizarse la asistencia sanitaria». Detallan que durante los meses de julio, agosto y septiembre sólo se van a realizar 481 contratos para cubrir las vacaciones de los profesionales de todo el complejo, que incluye Hospital Regional, Civil, Materno-Infantil y CARE, y que tiene una plantilla media de 6.470 trabajadores de todas las categorías.

Respecto a los contratos Covid y de programas (de entre tres y seis meses de duración), el CSIF critica que sólo se han autorizado 1.189 contratos para los cuatro centros del Hospital Regional hasta final de año, dejando de renovarse 600 de ellos.

Por su parte, el SMM apunta en una comunicación que se llegará al verano «una época de descanso para muchos, pero no para los médicos del Hospital Clínico de Málaga». Critican que «de nuevo vuelven a aparecer los recortes en personal, precisamente en la época en que más falta hace un refuerzo, y de nuevo vuelven a aparecer límites en la asistencia que se presta a los malagueños».

«Esto se suma al traspaso de la población atendida por el Hospital de Alta Resolución de Benalmádena al área hospitalaria del Hospital Virgen de la Victoria, lo que supone un incremento del 18% de la población atendida por el Hospital Clínico, sin que se hayan asignado los recursos económicos para mantener dicho HARE, algo que es una vergüenza, y ahora lo tienen que sufrir los médicos y los usuarios del Clínico que verán aumentar las listas de espera», añaden.

El Sindicato Médico también apunta que esta semana han sabido que se suprimían «sin previo aviso, y como mínimo hasta final de año, las denominadas continuidades asistenciales, es decir, las consultas que se llevan a cabo en horario de tarde programadas en la gran mayoría de los casos para reducir listas de espera y agilizar la asistencia hospitalaria a la población, de obligación para los médicos».

«El SMM quiere expresar en nombre de los médicos afectados su rechazo más absoluto a esta medida, tanto por la enorme repercusión que tendrá en la calidad y eficacia de la asistencia que se presta, como por el deterioro de las condiciones laborales de los facultativos, que ven cómo una actividad obligatoria desaparece sin ningún tipo de aviso ni justificación», apuntan al respecto.

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