Cáritas Española atendió a 1,56 millones de personas dentro de España en 2022, un 3,3% menos que en 2021 (53.090 personas menos), mientras se incrementó el número de personas atendidas fuera del país, que ascendió a 1,27 millones, un 26% más que el año anterior (262.144 personas más), según la Memoria anual 2022 de Cáritas Española, que ha sido presentada este miércoles.
Así, en total, teniendo en cuenta tanto el número de personas apoyadas por la labor social de la Iglesia dentro de España como las atendidas fuera de sus fronteras, Cáritas Española acompañó a 2,8 millones de personas en 2022, un 8% más que en 2021 (209.054 personas más). Cáritas achaca este incremento total a la crisis humanitaria provocada por la guerra en Ucrania.
Para atender a estas 2,8 millones de personas, durante 2022, Cáritas Española invirtió la cifra «récord» de 457,2 millones de euros, 54 millones de euros más que el año anterior (un 13,4% más), en sus diferentes recursos y proyectos dentro de España y en acciones de cooperación internacional en terceros países.
«Vivimos tiempos de crisis acumuladas. Tras la pandemia provocada por el Covid-19, vino la guerra de Ucrania, el aumento de la movilidad humana, la evolución del coste energético y la inflación. Esta situación, tanto en el ámbito local como mundial, ha acrecentado la pobreza y la desigualdad», ha asegurado la secretaria general de Cáritas Española, Natalia Peiro.
Por tipo de programas, en el de Acogida y Asistencia, atendieron en el último año a 1,19 millones de personas, un 16,82% más que antes de la pandemia (un millón en 2019).
La mayoría de las personas atendidas en los programas de Acogida y Asistencia recibieron ayudas para el acceso a consumo de alimentos seleccionados, adquiridos y gestionados directamente por ellos mismos (385.000), para el pago del alquiler de sus viviendas (120.000) o para el de los recibos de los suministros (100.000).
Además, en ayudas para vivienda, Cáritas invirtió 54 millones de euros (46 millones, en alquileres y 8 millones en recibos de suministros) y otros 46 millones en alimentos.
«Como consecuencia del aumento del coste de vida, las familias dedican una mayor parte de su presupuesto a pagar la vivienda y a otros gastos esenciales. La vivienda se ha convertido en un pozo sin fondo para los ingresos de las familias. Dedicar más recursos de los recomendados a la vivienda genera no poder cubrir otras necesidades básicas, como garantizar unos mínimos de confort térmico o la generación de deudas por impagos», ha apuntado Peiro.
Por otra parte, Cáritas dedicó una dotación total de 117,5 millones de euros a los itinerarios de inserción sociolaboral, unos recursos con los que consiguió atender a un 11,7% más de personas en busca de empleo que en 2021.
MÁS DE 5.000 UCRANIANOS ATENDIDOS EN ESPAÑA
En cuanto a la cooperación internacional, en 2022, la confederación destinó más de 23,6 millones de euros y apoyó a 48.084 personas en Ucrania y a 7.883 en los países limítrofes. Además, en España, la red de Cáritas diocesanas atendió a 5.378 personas ucranianas. Al mismo tiempo, han seguido con su labor en otros 40 países de América, Asia, Medio Oriente, Norte de África y África subsahariana.
Entre otros programas que más recursos utilizaron a lo largo del año pasado fueron los de personas en situación de sinhogarismo (38,8 millones), personas mayores (35 millones) y los de familia, infancia y juventud (29,6 millones).
Estas inversiones han sido posibles gracias al apoyo de los socios, donantes y colaboradores privados, que han aportado más de 304,2 millones de euros y de las distintas Administraciones Públicas, que aportaron a los programas de Cáritas un total de 152,9 millones de euros, un 24,2% más que el año anterior. Así, un 66% de los fondos fueron origen privado y un 33%, públicos.
De cara a las próximas elecciones generales del 23 de julio, la secretaria general de Cáritas ha recordado las ocho propuestas políticas que la institución ha presentado a los partidos de todo el arco parlamentario para que sean incorporadas a sus programas electorales.
Entre estas propuestas, Cáritas reivindica medidas para prevenir la exclusión residencial, el derecho a una buena administración, un plan integral de cuidados o políticas de empleo inclusivas, entre otras. También propone una política migratoria que contemple oportunidades más allá del mercado laboral, garantizar una protección efectiva de las víctimas de violencia machista y una política de cooperación internacional que ayude a fortalecer la sociedad civil.
Durante la presentación, el presidente de Cáritas Española, Manuel Bretón, ha manifestado que las cifras de la Memoria «representan un compromiso compartido» que «empuja a no mirar para otro lado ante al sufrimiento de los demás». También ha mostrado su agradecimiento a empresas, instituciones, socios, donantes particulares, voluntarios y Administraciones del Estado. «Su ayuda nos permite poder dar visibilidad a situaciones de vulnerabilidad y reaccionar de manera efectiva ante los retos que nos plantean», ha zanjado.
