Adiós al ascenso directo (0-1). El Málaga afrontaba este fin de semana un partido que puede ser crucial. Era contra nada más y nada menos que el líder; el Castellón. El domingo a las 20:00 horas La Rosaleda albergaría el partido de la jornada en clave bronce ante 22947 espectadores. Pellicer revolucionaba el once con un nuevo sistema; 5-3-2. Los elegidos para la final adelantada eran: Herrero; Jokin, Juande, Galilea, Moussa, Dani Sánchez; Manu Molina, Sangalli, Dani Lorenzo; Dioni y Roberto.
El partido comenzaba con un aviso del Castellón con un gol anulado de Jesús de Miguel, que con tres o cuatro pases se plantaban en zona de peligro. El partido estaba muy igualado, pero las ocasiones más claras eran de los visitantes. Adiós al ascenso directo (0-1)
Superada la primera media hora de partido Luca Sangalli tuvo que ser sustituido por molestias en los músculos isquiotibiales de su pierna izquierda, entraba en su lugar Izan Merino. Hombre por hombre en la sala de máquinas para no cambiar la fluidez que había.
Fue ganando más presencia en área rival el Málaga, que pudo marcar en varias ocasiones en el último tramo, pero era el Castellón nuevamente el que metía miedo con un segundo gol anulado y varios acercamientos con peligro. Terminaba la primera mitad con empate a cero en un choque muy igualado que requería quizás de más chispa, lo que había en el banquillo con jugadores como Larrubia, Kevin o el joven Ochoa (0-0).
En la reanudación se empezaba a encrispar el ambiente, que ya se estaba calentando en el final del primer tiempo. En una jugada a balón parado llegaba el primer tanto del choque. Manu Sánchez anotaba a través de un córner en el minuto 55. Sentaba como un jarro de agua fría, pero el partido lejos de cerrarse se caldeaba más con una Rosaleda que echaba humo.
Adiós al ascenso directo (0-1)
Pellicer agitaba el árbol y cambiaba por completo lo que había en el campo. Entraban Larrubia y Kevin por Moussa y Juande, instalándose el sistema 4-4-2 con Izan Merino en la zaga central.
Lo intentaba el Málaga pero Larrubia y Kevin no daban la chispa que necesitaba el equipo. El segundo forzó para llegar y se notaba que no podía, le costaba correr. Buscaba refrescar Pellicer con la entrada de Víctor García y Juan Hernández para los últimos minutos. En el 84’ pudo sentenciar el Castellón. Kastaneer falló a puerta vacía el que era el 0-2. Un milagro que daba fe para ir a por el empate.
Lo intentó con más corazón que cabeza el conjunto de la Costa del Sol pero el Castellón se aferraba con todo a la victoria a pesar de quedarse con 10 en los últimos minutos por una doble amarilla a Villahermosa. El Málaga se despide del ascenso directo por la derrota ante los castellonenses que le dejan a 13 puntos. No fue posible y los malaguistas siguen sin ganar en el 2024. Se le hace larga la cuesta de enero a los blanquiazules (0-1).
