La plataforma civil Bosque Urbano Málaga (BUM) mantiene su batalla judicial para que los antiguos terrenos de Repsol sean un pulmón verde de la ciudad. Una lucha complicada, pero aún así no cejan en su empeño. Ahora, el juzgado número 6 de lo contencioso-administrativo de Málaga ha admitido a trámite el recurso presentado por la plataforma ciudadana contra la aprobación de la Autorización Ambiental Unificada de los terrenos.
Con la presentación de este recurso, la plataforma ciudadana Bosque Urbano Málaga apela la resolución de la Delegación Territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul en Málaga, fechada a 16 de febrero de 2024, sobre el otorgamiento de la autorización ambiental unificada para el proyecto de urbanización del ámbito SUNC-O-LO-17 —antiguos terrenos de Repsol— del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Málaga.
Según detallan en un comunicado, «la resolución recurrida autoriza las obras del proyecto de urbanización para los antiguos terrenos de Repsol, no obstante, impone una serie de condiciones que deben cumplir los promotores. Entre dichas obligaciones está la necesidad de que el promotor del proyecto afronte los preceptivos trabajos de descontaminación en la parcela».
Desde BUM apuntan que el proyecto de descontaminación está recurrido en los tribunales por la plataforma ciudadana al considerar, entre otras cosas, que «no se hace una adecuada evaluación de la contaminación del freático y que los estudios de contaminación y los trabajos de descontaminación se centran solo en la zona norte de los terrenos», mientras que Bosque Urbano Málaga defiende que se debe actuar en la totalidad de la parcela.
La plataforma ciudadana Bosque Urbano Málaga surge como un movimiento ciudadano comprometido con la creación de una gran zona verde en el corazón de la capital de la Costa del Sol. Su objetivo principal es transformar los antiguos terrenos de Repsol en un bosque urbano accesible para toda la ciudadanía, promoviendo un modelo de ciudad más sostenible y saludable.