Almonte asegura que la captación de agua en Matalascañas es «totalmente sostenible y afecta al acuífero». El Ayuntamiento de Almonte (Huelva) ha explicado que, de acuerdo con un informe elaborado por la empresa concesionaria del servicio de agua potable, el suministro a Matalascañas se realiza a través de cinco sondeos autorizados por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, toda vez que han asegurado que desde 2010 «no ha habido variaciones significativas en los niveles freáticos», lo que demuestra, a su juicio, que la captación de agua es «totalmente sostenible y no ha afectado al estado del acuífero».
De este modo, a través de una nota de prensa, el Ayuntamiento de Almonte ha respondido a «las recurrentes noticias de cada verano que afirman que los visitantes de Matalascañas están agotando el agua de Doñana«, por lo que se ha aportado «información precisa sobre la gestión de los recursos hídricos que abastecen la urbanización costera».
Almonte asegura que la captación de agua en Matalascañas es «totalmente sostenible y afecta al acuífero»
De este modo, el Ayuntamiento almonteño ha explicado, basándose en un informe de la empresa concesionario de agua, que el suministro a Matalascañas se realiza a través de cinco sondeos autorizados por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir. Estos sondeos, ubicados a lo largo de la carretera norte, «son objeto de un control continuo de sus niveles estáticos y dinámicos».
Al respecto, los datos registrados desde 2010 confirman que «no ha habido variaciones significativas en los niveles freáticos», lo que demuestra, a su juicio, que «la captación de agua es totalmente sostenible y no ha afectado al estado del acuífero».
Asimismo, este estudio señala que, «a pesar del incremento de la población y la demanda de agua en los últimos quince años», el volumen de agua extraída «ha disminuido en un 15%, gracias a los esfuerzos conjuntos del Ayuntamiento de Almonte y Aqualia». «Este logro se ha alcanzado mediante acciones como la búsqueda y reparación de fugas en la red de distribución y la optimización del riego en zonas verdes», han subrayado desde el Ayuntamiento.
Por otro lado, señalan que el estado de la laguna de Santa Olalla, uno de los elementos naturales de Doñana, «depende directamente de las precipitaciones anuales» y que «la observación de varios años consecutivos con poca lluvia ha mostrado que la laguna puede secarse completamente, independientemente del volumen de agua extraída para el abastecimiento humano». Además, han remarcado que en años con mayor cantidad de lluvias, como el presente, «la laguna se mantiene en niveles adecuados».
Desde el consistorio almonteño han reiterado su «compromiso» con «la protección de Doñana y con el desarrollo sostenible de sus recursos hídricos» y que las políticas de gestión implementadas «garantizan un equilibrio entre el suministro de agua potable a la población y la conservación del entorno natural».