En los últimos días, la caída del régimen de Bashar Al-Assad en Siria a manos de los rebeldes y grupos terroristas ha copado las noticias internacionales. Ángel Sastre, periodista internacional y residente en Málaga, conoce de primera mano el conflicto en este país, donde fue secuestrado durante un año por el grupo terrorista sirio Al-Nusra que, tras algunas conversiones, ahora ha tomado el poder.
Precisamente, este miércoles 11 dará una charla a los estudiantes de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Málaga (UMA) sobre narrativa audiovisual en zonas de conflicto. Este reportero internacional fue liberado en mayo de 2016 junto a los otros periodistas españoles Antonio Pampliega y José Manuel López tras el cautiverio que. como es lógico, le dejó una profunda marca.
«Yo estuve secuestrado 11 meses por el grupo terrorista Al-Nusra, que son los actuales HTS, es decir, los que me tuvieron secuestrado son los que han tomado el poder ahora. Lo que pasa que han dado la espalda a Al Qaeda y quieren ofrecer otra visión, pero es el mismo grupo integrista y terrorista que me secuestró», explica Sastre.
los que me tuvieron secuestrado son los que han tomado el poder ahora.
Aunque la cobertura de los acontecimientos está resultando más triunfalista que fatalista, el periodista recuerda que estos insurgentes «podrían ser unos lobos con piel de cordero»: «Al final el líder actual de HTS es el exlíder de Al Qaeda, Abu Mohammed al Jawlani. Ahora bien, ellos mismos han moderado su discurso, llegando a asegurar que están dispuestos a disolverse y a negociar con el primer ministro sirio para hacer un gobierno de transición», reconoce.
Previsiones
Incluso para un gran conocedor del conflicto sirio, hacer una previsión de lo que va a ocurrir resulta complicado: «Al final hay un grupo integrista y radical como trasfondo. Al Assad, dentro de lo malo y de que ha cometido crímenes contra los derechos humanos, era un presidente de los más moderados, mantenía a raya a los integristas, permitía las religiones como el cristianismo… Entonces la pregunta es a quién vamos a poner ahora, si se va a avanzar hacia una democracia o se irá a peor con un caso como Libia, que es un estado fallido».
Para Sastre, la confluencia de intereses es un factor determinante sobre el territorio de Siria, sobre todo en lo referente al gas, por lo que su vaticinio no es del todo esperanzador: «Detrás de todo esto está Turquía, Qatar, los kurdos y HTS. La oposición, más democrática, está en el exilio y ahora mismo no hay ni partidos políticos. Yo no soy muy optimista, no hay unas bases en Siria para que pueda haber unas elecciones libres».
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