Oportunidad única del Antequera CF para volver a dar un golpe encima de la mesa. En los últimos partidos no ha sido ese equipo reconocible en el campo que, además de controlar el esférico, dominaba el área en fase ofensiva y defensiva. Ha perdido la contundencia en la finalización y, especialmente, en la protección de su portería. Si es capaz de mejorarlo, se convertirá en ese conjunto que, durante muchas fases de la temporada, dominó con solvencia el grupo II de Primera Federación. El domingo 6 de abril, a las 12:00 horas en el Maulí, mide sus fuerzas con un firme candidato al play-off como el Hércules de Alicante CF, el primer equipo que fue capaz de vencerle en la 1ª vuelta. Ganar en casa y con la afición es la mejor reivindicación posible para continuar optando a todo en las últimas fechas del calendario.
Javier Medina, técnico de la formación blanquiverde, tiene muy claro cómo hay que dejar atrás la racha de dos derrotas seguidas ante Algeciras (1-3) y Atlético Sanluqueño (4-2). «Cuando llegan los momentos malos, intentar volver al origen, intentar volver a lo que nos ha hecho estar aquí durante toda la temporada, intentar ser lo que hemos sido durante ese tramo largo de temporada, donde hemos sido un equipo muy competitivo, un equipo que tenía mucha estabilidad en el campo, que se movía poco, pero que hacía circular bien el balón, que luego era muy responsable defensivamente, muy agresivo, sin balón para presionar, que elegía muy bien según qué forma de atacar, según la presión que hacía el rival y ser un equipo lo más competitivo posible. Creo que los últimos partidos, pues, nos ha faltado un poco eso. El otro día tuvimos a muy buen nivel con el balón, pero a muy mal nivel sin balón y es lo que tenemos que intentar, buscar otra vez ese equilibrio, ese poso, esa estabilidad, esa tranquilidad también y todavía queda camino por recorrer y volver a ser nosotros», detalla.
El Hércules, cuatro puntos por detrás del cuadro antequerano, llega al Maulí con la confianza de haber ganado al Ibiza y de haber empatado con el Ceuta y el entrenador local avisa de la dureza de los alicantinos de cara a la 31ª jornada. «Siempre hemos dicho que son todos complicados, pero jugar contra equipos que se juegan el descenso, que viven a partir de tus errores, si cometes errores, se alimentan de ello y Ya es muy difícil prácticamente de ganar. Pasa en todas las categorías. Ahora tenemos un equipo, pues, como vimos el otro día con el Ibiza, que compite muy bien, muy fuerte en la parcela ofensiva. Es un equipo que va para adelante, que tiene esa ambición porque está llamado a estar en los puestos de play-off. Lleva todo el año peleando para para estar y lo va a intentar hasta el final y nosotros en esos partidos también salimos con un nivel de tensión mucho más alto, porque sabemos de la calidad del rival que tenemos enfrente. Lo hemos demostrado durante todo el año. En esos partidos competimos muy bien, que el año pasado era un poco lo contrario. Nos costaba en ese partido grande, un poco, poder tener la calma y la capacidad para competir y este año, quizás, hemos competido mejor en esos contextos y confío mucho en que volvamos a hacerlo el domingo y que nos levantemos aquí todos juntos».