Estar preparado es importante, saber esperarlo es aún más, pero aprovechar el momento adecuado es la clave de la vida (Arthur Schnitzler).
El saber estar preparado es lo importante, preparado para afrontar lo que está ahora aquí, preparado para saber que lo que te venga, la clave de la vida, la clave de los cofrades es saber estar preparado para el presente, porque en el futuro no sabemos lo que pasará, solo Dios lo puede saber.
Quizás lo vivido te hace reflexionar sobre lo verdaderamente importante para un cofrade, reflexionar sobre la verdadera realidad de la Semana Santa, reflexionar sobre los detalles que te hacen ser un buen cofrade o un cofrade bueno, o lo que debería de ser todos los cofrades buenas personas cofrades.
Posiblemente nos estamos preparando para vivir la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo, vamos estoy seguro que todos los cofrades están pensando en el verdadero significado de la liturgia de la palabra, pero segurísimo, todos están pensando que lo verdaderamente importante pasa el Domingo de Resurrección, sí sí, casi seguro… ¡que sí! que todos nos estamos concienciando para eso.
Bandas de música, flores, mantos, sayas, varales, cera y enseres, son los verdaderos motivos para vivir una Semana Santa, pero los cofrades somos así, nos gusta, y a la vez rezamos de una manera especial y diferente y sabemos que el Domingo de Resurrección volverá a vivir Cristo en nosotros.
Después de lo vivido, vives todo esto de una manera diferente, pero a la vez con una ilusión desmesurada, tenemos que tener ilusión en ver a Jesús y a María por las calles de Málaga, por seguir rezando mirando al cielo, mirando por encima de los varales de los tronos, seguir escuchando las bandas, la música, las calles con el reguero de cera, seguir creyendo en nuestra Semana Santa y estar preparados para lo importante, aprovechar el momento adecuado.
Estar preparado es importante, pero aprovechar el momento adecuado es la clave de la vida.