El Consejo de Gobierno ha autorizado el inicio de las obras de la Instalación Desaladora de Agua de Mar (IDAM) de Marbella, una vez que ya se había aprobado por el Ejecutivo andaluz su declaración de emergencia.
Esta actuación fue declarada de interés de la Comunidad Autónoma de Andalucía dentro de las actuaciones que se llevan a cabo para paliar los efectos de la sequía, según han informado desde el Gobierno andaluz en un comunicado.
Ahora, con la firma del contrato por valor de 2,85 millones de euros, comienza esta actuación «encaminada a la mejora de la calidad del agua desalada que redundará en la eliminación de cualquier riesgo para la salud mediante la sustitución de cuatro bastidores antiguos de membrana de fibra hueca por otros dos bastidores nuevos de membranas de arrollamiento en espiral», han precisado.
Igualmente, se incorporarán nuevos tubos de presión, se adaptarán el resto de elementos existentes y se sustituirán los colectores de acero inoxidable para que puedan seguir operativos.
Adicionalmente, se instalará un nuevo bastidor de segundo paso que va a permitir «una mayor eficiencia y mejor aprovechamiento del agua al conseguir que solo se rechace un 1,8% del caudal producido en el primer paso».
Por otro lado, el Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento del informe sobre la evolución de la situación hidrológica de Andalucía. De esta forma, en los siete días precedentes al informe se constata un aumento de cinco hectómetros cúbicos (un 0,04% más) del agua embalsada en Andalucía como reflejo de las últimas precipitaciones.