Un niño de muy corta edad ha perdido la vida en el municipio almeriense de Roquetas de Mar tras ser sometido a una circuncisión en su propia vivienda, realizada de forma ilegal por un individuo sin formación médica. Tanto el supuesto practicante como los padres del menor han sido detenidos por la Guardia Civil por su presunta implicación en los hechos.
La intervención, llevada a cabo en condiciones precarias y sin garantías sanitarias, provocó una grave hemorragia en el pequeño. Fuentes cercanas a la investigación indican que, al percatarse de la gravedad de las lesiones, los progenitores lo trasladaron con urgencia al centro de salud más próximo. Sin embargo, los sanitarios no pudieron hacer nada para salvarle la vida. El menor falleció a los pocos minutos de llegar al consultorio.
A la espera de la autopsia
El suceso tuvo lugar durante la noche del domingo y, tras confirmarse la muerte del menor, los servicios médicos activaron el protocolo policial por las circunstancias anómalas del caso. Agentes de la Guardia Civil procedieron entonces a detener tanto a los padres como al individuo que habría realizado la operación, e iniciaron el registro de la vivienda en la que se llevó a cabo la práctica quirúrgica. El cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Almería, donde se le realizará la autopsia para confirmar las causas exactas del fallecimiento.
Los tres detenidos pasarán a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Roquetas de Mar, que instruye el caso. La investigación sigue abierta para esclarecer todos los detalles de lo ocurrido. Mientras tanto, el trágico suceso ha generado una fuerte conmoción en la localidad y reabre el debate sobre las consecuencias de las prácticas médicas ilegales en el ámbito doméstico.
A falta de concretarse las causas de este suceso, no es la primera vez que se producen tragedias similares en España a causa de prácticas rituales realizadas al margen del sistema sanitario. Estas intervenciones suelen llevarse a cabo en domicilios particulares por personas sin formación médica ni las mínimas condiciones de higiene. En años anteriores se han registrado casos similares en comunidades como Valencia, Zaragoza o Murcia, en los que menores han sufrido graves lesiones e incluso la muerte tras ser sometidos a estas cirugías clandestinas.