En Bioparc Fuengirola (Málaga), la naturaleza vuelve a ser protagonista con el nacimiento de una cría de tití de Goeldi, una especie amenazada que encuentra en el parque un lugar seguro para su conservación. La pareja de titíes de Goeldi forma parte del grupo de pequeños primates que habita en la recreación de Centro y Sudamérica, el nuevo hábitat del parque.
La relación entre la cría y sus progenitores está siendo «muy positiva», lo que refuerza las expectativas de éxito en el cuidado y desarrollo de esta pequeña cría. La relación entre ambos es muy especial. La hembra lleva a la cría con ella las dos primeras semanas y luego la carga el macho y vuelve con la madre para mamar, alternando el cuidado entre ambos. Tras una gestación de alrededor cinco meses, la cría ha nacido en perfectas condiciones y está recibiendo todos los cuidados necesarios. Los especialistas del parque monitorean de cerca su desarrollo.
Este nacimiento no solo es un logro para Bioparc Fuengirola, sino también una llamada a la acción sobre la importancia de preservar especies como el tití de Goeldi, que se enfrenta a serias amenazas en su entorno natural debido a la pérdida de hábitat y otros factores humanos. Esta especie, habitualmente pare una única cría, siendo más frecuente en otras especies de titís los partos dobles, o raramente, triples.
Para los visitantes, la llegada de esta cría supone una oportunidad única de observar de cerca a esta especie y conectar con su historia, subrayando el papel que los zoológicos modernos desempeñan en la conservación global.
Especie en peligro de extinción
El tití de Goeldi (Callimico goeldii) es una especie de primate endémica de la región amazónica occidental, cuya supervivencia está cada vez más comprometida. Su distribución abarca áreas de Brasil, Colombia, Perú y Bolivia, pero su población en libertad es alarmantemente reducida.
Según estimaciones recientes, apenas quedan unos pocos miles de ejemplares en estado silvestre, aunque la cifra exacta es difícil de determinar debido a su naturaleza discreta y la dificultad de su monitoreo.
Esta pequeña especie de primate enfrenta múltiples amenazas en su hábitat natural. La principal es la destrucción de los bosques tropicales debido a la deforestación, impulsada por actividades humanas como la expansión agrícola, la tala ilegal y la minería. Además, su tamaño compacto y atractivo lo hacen especialmente vulnerable al tráfico ilegal de fauna, un problema que afecta gravemente a las poblaciones silvestres.