La Diócesis de Málaga ha habilitado diversos mecanismos para que los ciudadanos que lo deseen puedan colaborar en la financiación de las obras de la cubierta de la Catedral, que comenzarán previsiblemente después de Semana Santa, en el segundo trimestre de 2023.
Así lo ha anunciado el deán del templo, José Manuel Ferrary, en un acto para presentar la iniciativa. De este modo, bajo el lema de la campaña ‘Yo con mi Catedral’, se han abierto cinco cuentas en diferentes entidades bancarias y dos números de Bizum, 06397 y 06437.
Además, quienes deseen suscribir una cuota o realizar un donativo puntual mediante domiciliación o tarjeta podrán hacerlo a través de un apartado específico para ello en el portal de la Conferencia Episcopal Española ‘Dono a mi iglesia’. Según han indicado desde la Diócesis, los donativos para este fin desgravan en el IRPF.
Ferrary ha expresado que, a su juicio, «debemos estar implicados todos los malagueños, hay muchas personas e instituciones que no solo han mostrado su apoyo, sino que han planteado una ayuda para poder sacar adelante este proyecto ambicioso», por lo que el objetivo de esta iniciativa es «dar respuesta a esa demanda».
El proyecto de las obras busca «parar esas filtraciones que están haciendo daño» a la Catedral. El deán ha recordado la colocación de redes que se llevó a cabo para evitar la caída de elementos sobre los visitantes, algo que «no solventa el daño estructural que está sufriendo» el edificio.
Por ello, ha hecho un llamamiento «a toda esa Málaga de a pie, a todo lo que no son instituciones ni tienen grandes empresas» que quieran «colaborar y aportar un granito de arena».
En el acto también ha estado presente el arquitecto encargado de las obras, Juan Manuel Sánchez La Chica, quien ha explicado que han retomado el «proyecto magnífico» que dejó preparado en 1764 Ventura Rodríguez para el tejado del templo, y que debido a la paralización de la obra en 1782, «no se pudo finalizar», pero que ahora se retoma actualizado «a la tecnología de hoy en día y a la necesidad».
«EL AGUA ES EL PRINCIPAL OBJETIVO A EVITAR»
De esta forma, se eliminará el recubrimiento de las bóvedas para «disfrutar» el trazado original. Además, no solo se modificará el tejado, sino también se arreglará el sistema de pluviales, desde las bajantes hasta las terrazas intermedias y la conexión con el saneamiento de la ciudad, ya que «el agua es el principal objetivo a evitar en un edificio como la Catedral».
La piedra caliza de la que están hechos estos elementos arquitectónicos «es muy porosa», pero gracias a la cámara de aire se secarán. «Cuando se seque, ya comenzaremos el proyecto en el interior», ha detallado el arquitecto, quien prevé que «vamos a disponer de un espacio no solo para el disfrute del patrimonio, sino para la explicación de la historia de la construcción del templo».
Asimismo, ha explicado que la obra se realizará desde el costado sur «para que el acceso se libere», de forma que «el grueso se hará desde la calle Postigo de los Abades».
En cuanto a los plazos, en breve comenzará un proceso abierto de licitación. El deán ha asegurado que la previsión, «sujeta a muchos factores», es de que se abra antes de final de año, «cuanto antes». Cuando eso ocurra, las empresas constructoras, que ya «manifiestan interés», dispondrán de 45 días para presentar ofertas.
Tras ello, habrá otros 45 días para estudiarlas y entonces «se dará el pistoletazo de salida para el inicio de la construcción de este importantísimo proyecto», ha anunciado el arquitecto. De esta forma, se calcula que las obras comenzarán después de Semana Santa, en el segundo trimestre de 2023, con un plazo de ejecución de dos años y medio, es decir, 30 meses.
17 MILLONES DE EUROS
Sánchez La Chica ha recordado que el presupuesto necesario total para ejecutar las obras es de unos 17 millones de euros, cifra que ha aumentado debido al encarecimiento de los precios, pero que ya «se ha estabilizado».
Por su parte, el deán ha recordado que el Ayuntamiento de la ciudad aportará, por ahora, un millón de euros, mientras que la Diputación lo hará con 3.250.000, la Junta de Andalucía con 5,3 millones y la propia iglesia con un préstamo de tres millones. A ello se suma lo que previsiblemente aportará el Gobierno central, una cantidad que el responsable ha dicho que «en un tiempo» podrán conocer.
Asimismo, se contará con la colaboración de la banca y de empresas malagueñas. El deán ha destacado que «uno no espera una cantidad determinada, sino una colaboración masiva, que todos nos impliquemos y demos la importancia que la Catedral tiene para cualquiera, sea como sea y piense como piense».
En este sentido, ha expresado su deseo de «sentirnos partícipes de esta obra» y la necesidad de «salvaguardar nuestro patrimonio», puesto que la Catedral «es un templo en el que se realiza lo propio de la liturgia pero también otras actividades que van en consonancia con el templo, como las culturales». Ha insistido en que el monumento «también es un BIC, quizás el más importante que tengamos en la ciudad de Málaga, sin duda el más visitado».