El Grupo de Homicidios de la Comisaría Provincial de Málaga ha detenido este jueves a otras dos personas en relación con el homicidio de la mujer cuyo cadáver fue encontrado el martes dentro de una alcantarilla en la zona de Teatinos de Málaga capital. Estos dos se suman al arresto este pasado miércoles de un hijo adoptivo de la víctima, desaparecida desde mayo.
Así lo han informado fuentes policiales, apuntando que los investigadores han arrestado a un menor de 17 años, ajeno a la familia, por su presunta responsabilidad en los delitos de asesinato y robo con violencia, los mismos por los que fue detenido el hijo de 22 años de la víctima.
Según la investigación que lleva la Policía Nacional, el hijo de la fallecida y el menor de edad habrían asaltado a la víctima en su domicilio y, supuestamente, «acabaron con su vida». Han apuntado que en días posteriores, los investigados presuntamente «se habrían deshecho del cuerpo de la víctima», arrojando el cadáver al lugar donde finalmente fue localizado este pasado martes.
También se ha detenido a una mujer de 38 años por supuestamente encubrir al hijo de la fallecida –delito de encubrimiento–. En este caso, está previsto que sea oída en declaración en las próximas horas y, a continuación, ser puesta en libertad con cargos.
Por contra, el menor y el hijo de la fallecida serán puestos a disposición de la Fiscalía de Menores y del Juzgado de Guardia de Detenidos, respectivamente, este próximo viernes.
El hallazgo tuvo lugar sobre las 12.20 horas de este pasado martes 12 de julio. La Policía Nacional siempre apuntó a que se trataba de una muerte violenta, ya que el cuerpo tenía signos de violencia. La mujer estaba desaparecida desde el pasado 23 de mayo.
La investigación apunta a que la muerte se produjo presumiblemente por estrangulamiento y el móvil sería económico, «aparte de una personalidad del presunto autor especial, posiblemente vinculada al consumo de estupefacientes», según informó este pasado miércoles el comisario provincial, Enrique Barón.
El comisario ya señaló que se presume que la muerte «se produjo días después» de la desaparición, lo que provocó que el cadáver estuviera en avanzado estado de descomposición y dificultó inicialmente la identificación. Además, el cuerpo no habría estado todo el tiempo depositado en la alcantarilla.
