Un golpe no acaba con un equipo grande, lo hace más fuerte. El Antequera CF tiene una oportunidad única, el domingo 9 de febrero en Ibiza (12.00 horas), para demostrar porqué es el líder del grupo II de Primera Federación. En el último partido, ante el Fuenlabrada, su primera derrota en el Estadio Municipal El Maulí y la segunda de la temporada. Un mal resultado no puede mermar la ambición de jugadores y cuerpo técnico ni restar mérito a los resultados conseguidos. Es muy difícil rendir a un altísimo nivel durante tantísimas semanas y una derrota debe servir, únicamente, como motivación para seguir puliendo aspectos del juego, mejorar y salir en el siguiente evite con todo a por la victoria. Los de Javier Medina saben que visitan, en la 23ª jornada, a un rival en crecimiento y están listos para ser dominadores y contundentes en ambas áreas y no ceder puntos en su defensa del primer puesto.
La Unión Deportiva Ibiza, con Paco Jémez de entrenador, está empezando a ser un equipo muy peligroso y competitivo. Calidad y experiencia hay de sobra en la plantilla, pero le faltaba enganchar un par de resultados positivos y lo ha logrado en las últimas dos semanas de competición ante dos candidatos al disputar el play-off. En el estadio municipal de ‘Can Misses’, el 26 de enero, venció con contundencia al Mérida (3-0) y, a domicilio el 2 de febrero, ganó al Villarreal B por 1-2. Supo manejar su ventaja porque recibió el gol del filial amarillo en el tiempo extra. Una escuadra muy diferente a la que perdió, en noviembre de 2024, en la ciudad de Los Dólmenes por 2-0. En el mercado invernal se ha reforzado con Bebé, un delantero con un disparo potentísimo a puerta, y va a aportar su experiencia junto a la de otros jugadores con mucho talento y gran trayectoria. El haber estado hace poco en el fútbol profesional le convierte en un serio aspirante a pelear por recuperar ese hueco perdido en 2ª División. Al Antequera CF le gustan los retos y el domingo 9 de febrero quiere superar el de llevarse los tres puntos de territorio insular.
