La Pía Unión del Vía Crucis a la Cruz del Campo celebra este día 1, como cada primer viernes de marzo, el tradicional Vía Crucis en la Casa de Pilatos y en el que participa de manera directa el Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla. El piadoso rezo se desarrollará, como en años anteriores, por las galerías del patio interior y contará con la intervención musical de la Coral de San Felipe Neri. arzobispo Sevilla Vía Crucis
El arzobispo de Sevilla preside el Vía Crucis de la Pía Unión en la Casa de Pilatos
Además, los nuevos hermanos mayores jurarán como miembros de la Pía Unión. En este sentido, a las 19,00 horas tendrá lugar un misa en la Capilla de la Flagelación ante la reliquia del Santo Lignum Crucis y, en el ofertorio, se llevará a cabo el juramento de los nuevos consiliarios, miembros natos de esta Asociación y de los fieles que han sido admitidos como hermanos, detalla el Consejo de Hermandades en una nota de prensa. NOTICIAS SEVILLA
Asimismo, a la finalización de la eucaristía, está previsto el ‘Santo Ejercicio del Vía Crucis’, que discurrirá por las galerías bajas del patio central de la Casa de Pilatos, con el siguiente orden procesional: Cruz de las Toallas (Hermandad de los Negritos); Estandarte del Santo Cristo de San Agustín (Hdad. de San Roque); Estandarte de San Juan de Ribera (Hdad. de San Esteban); Estandarte de la Pía Unión, y relicario con el Santo Lignum Crucis, acompañado de los Hermanos Mayores con faroles. El rezo del Vía Crucis, así como la misa, estará presidido por el arzobispo de Sevilla, José Ángel Saiz Meneses.
Hace más de 500 años que el marqués de Tarifa, Fadrique Enríquez de Ribera, instituyó el rezo de las catorce estaciones tras regresar de un viaje a Tierra Santa donde asistió al acto que se celebraba en la Vía Dolorosa. «Cuentan que trajo catorce cruces del mismo modo de las que marcaban cada una de las estaciones del Vía Crucis de Jerusalén e ideó uno similar que fuera desde su palacio –la Casa de Pilatos– hasta el humilladero de la Huerta de los Ángeles, hoy templete de la Cruz del Campo, que tiene una distancia aproximada (997 metros)».
Aquel acto, en el que participaban las cofradías de Sevilla, fue el origen de las estaciones de penitencia y de la Semana Santa.