El Ayuntamiento de Málaga, a través del Instituto Municipal de la Vivienda, ha recibido una subvención dotada de 22.186.485,05 euros, procedentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia financiado por la Unión Europea, a través de los fondos Next Generation, y articulados mediante el Plan Ecovivienda de la Junta de Andalucía, para la construcción de la primera fase del sector Universidad donde el Consistorio promueve 476 viviendas protegidas en alquiler.
Estas 476 viviendas se encuentran actualmente en construcción en cinco parcelas municipales: la R1 consta de 84 viviendas; la R5 de 70; la R10 de 140; la R14 de 69 y la R16 de 113, ha indicado el Ayuntamiento en un comunicado.
Esta ayuda concedida al Ayuntamiento de Málaga y ratificada por el Gobierno central y la Junta de Andalucía esta semana, se une a dos subvenciones, que suman 38.497.149 euros, obtenidas por el Instituto Municipal de la Vivienda el pasado mes de noviembre para la construcción de otras 530 viviendas en el sector Universidad y para la rehabilitación de 581 viviendas en las barriadas de San Andrés y Palma Palmilla.
En total, la financiación europea para el impulso del Plan de Vivienda y Suelo 2023-2027 hasta la fecha alcanza los 60.683.634 euros, ha detallado el Ayuntamiento.
En concreto, el acuerdo para la financiación de la segunda fase del desarrollo de 530 viviendas, contemplaba una subvención dotada de 25.996.853 euros a la Sociedad Municipal de Viviendas de Málaga, a cargo del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia financiado por la Unión Europea, a través de los fondos Next Generation.
Por otro lado, en el marco de esta convocatoria de ayudas, el Ayuntamiento recibirá 12.500.296,83 euros para acometer trabajos de rehabilitación en las barriadas de San Andrés y Palma-Palmilla. En concreto, se destinarán 9.545.120 euros a la primera barriada y 2.955.176 euros a la segunda.
Los trabajos consistirán en la mejora de la envolvente de los edificios y la carpintería exterior, además de la instalación de placas fotovoltaicas y aerotermia.
Así, se reducirá un 80% de la energía primaria no renovable que consumen en las viviendas de los edificios. Esto hará posible una reducción en torno al 60% de la factura energética de los vecinos y vecinas de los edificios rehabilitados.