El Parlamento andaluz ha constituido esta semana, en el marco de la comisión sobre la Infancia y la Adolescencia, el grupo de trabajo para garantizar la protección de menores ante el acceso a la pornografía en Internet, cuya creación aprobó el Pleno el pasado 13 de julio.
El Pleno de la Cámara aprobó dicho grupo de trabajo a instancia de una iniciativa del Grupo Popular, que lo preside a través de su diputada Berta Centeno, y que cosechó el apoyo casi unánime del Parlamento, por cuanto recibió 101 votos a favor y cosechó las cinco abstenciones del Grupo Por Andalucía.
La vicepresidenta y la portavocía de la comisión que alberga este grupo recae en la parlamentaria de Vox Ana María Ruiz Vázquez, mientras que la secretaria de la comisión es la diputada ‘popular’ Maribel Lozano, según la información de la Cámara andaluza consultada por Europa Press.
En la sesión constitutiva, celebrada el pasado miércoles 27 de septiembre, se acordó dar a los grupos parlamentarios hasta el próximo día 16 de octubre, a las 12,00 horas, de plazo para remitir las solicitudes de documentación y de comparecencias en dicho nuevo órgano de la Cámara, que volverá a reunirse el miércoles 25 de octubre, para calificar dichas propuestas y establecer un calendario en función de la documentación que se remita al grupo de trabajo, según informó su presidenta, Berta Centeno.
«A partir de ahí, en función de esa documentación y propuestas, estableceríamos el siguiente calendario o si hay otra solicitud de documentación», informó también Berta Centeno en la sesión constitutiva del pasado miércoles.
JUSTIFICACIÓN DEL GRUPO DE TRABAJO
El PP-A defendió la iniciativa de creación de este grupo de trabajo como una necesidad porque «son cada vez más los menores que consumen vídeos sexuales para adultos», una tendencia a la que «se inician de forma más temprana», según advirtió el Grupo Popular, que citó datos de 2021 de la Agencia Española de Protección de Datos (AEDP), que señalan que «los ocho años es la edad media de primer acceso, mientras que a partir de los 14 el consumo ya es generalizado».
Consecuentemente, el PP-A se lamentó de que «el acceso a la pornografía se ha normalizado entre los más pequeños», y que esa facilidad para ver contenidos pornográficos se hace con «una intensidad y una escala que nunca antes se había vivido», hecho que explicó por «el desarrollo de la tecnología y el fácil acceso a Internet de forma anónima y sin límite».
El PP-A argumentó que, aun cuando la legislación contempla medidas «para crear entornos digitales seguros y mecanismos de control», la realidad es que «no están siendo suficientemente efectivas», y advirtió entonces de «las graves y negativas consecuencias del consumo de pornografía en la educación y las conductas afectivo-sexuales de los menores», y para ello abogó por una receta como «limitar el acceso» y «una adecuada educación afectivo-sexual».
El PP-A se remitió a las jornadas anuales del Consejo Audiovisual de Andalucía, celebradas en mayo, donde se analizó ‘La indefensión de los menores ante la pornografía en Internet’, un trabajo que calificó como «un excelente punto de partida para continuar trabajando en esta línea en la Cámara andaluza», y apeló a una proposición no de ley (PNL) suya, aprobada en marzo de este año, para reclamar medidas efectivas para limitar el acceso de los menores a la pornografía.
A juicio del Partido Popular, «los poderes públicos deben prestar especial atención» a ese «creciente y alarmante consumo de pornografía entre los menores», por lo que instó a «abrir un debate serio y riguroso» sobre esa práctica y las medidas que se necesitarían para tener soluciones desde distintos ámbitos y administraciones.
