El servicio de Otorrinolaringología del Hospital Regional Universitario de Málaga ha puesto en marcha una Unidad de Voz Intervencionista con la que dar respuesta a pacientes con trastornos del movimiento laríngeo. Cada año atenderá a más de un centenar de personas que presenten este tipo de problemática derivada de patologías oncológicas o neurológicas.
Esta unidad, en la que trabajan de forma conjunta los otorrinolaringólogos y profesionales del servicio de Neurofisiología, realiza electromiografías (EMG) laríngeas, estudios tanto para el diagnóstico como para el tratamiento de los trastornos de la voz.
Esta proporciona información acerca del estado de los nervios y músculos laríngeos completando la evaluación diagnóstica de un gran número de afecciones, fundamentalmente los trastornos del movimiento laríngeo.
Asimismo, permite el estudio causal de alteración nerviosa, conocer la naturaleza de la lesión, a qué nivel se produce, así como descartar miopatías, y diferenciar, en las parálisis laríngeas, entre fijación mecánica y lesión neurógena o verdadera parálisis de la cuerda vocal, según ha informado la Junta en un comunicado.
La jefa de servicio de Otorrinolaringología del Hospital Regional Universitario de Málaga, Teresa Cantera, ha explicado que a nivel terapéutico, la electromiografía laríngea permite guiar la inyección de toxina botulínica en pacientes con trastornos neurológicos de la movilidad laríngea. También permite guiar la inyección de materiales de relleno en parálisis laríngeas.
«En un primer momento, se hace la EMG laríngea y se monitorizan las cuerdas vocales; en un siguiente paso, se hace una punción por vía externa (a través de la membrana cricotiroidea) hasta llegar a la cuerda vocal, lo que avisa el monitor de EMG y seguidamente se hace la inyección. De la misma manera se inyecta el material de relleno en caso de parálisis laríngeas», ha indicado Cantera.
Asimismo, ha explicado que se infiltra una cuerda vocal para minimizar el riesgo de complicaciones y al cabo de 2-3 semanas se infiltra la cuerda vocal contralateral. El efecto se nota al cabo de una o dos semanas y dura unos seis meses, al cabo de los cuales hay que repetir el tratamiento.
Al respecto, la doctora Cantera ha explicado que se trata de un «gran avance» para el complejo sanitario, puesto que hasta mayo de 2022 –fecha en que se puso en marcha la unidad– los pacientes que requerían un estudio de electromiografía laríngea eran derivados a otras provincias, lo que ahora favorece el seguimiento y facilita el desplazamiento por la cercanía al centro de los pacientes de Málaga.
Los trastornos de la voz manifiestan la dificultad para producir sonidos al tratar de hablar o reflejan un cambio en el tono o calidad de la voz.
Estos pueden estas causados por tumores benignos de ccvv (pólipos), laringitis crónicas o agudas, edemas laríngeos, cáncer de laringe, trastornos neurológicos y trastornos funcionales. Entre los más frecuentes están los pólipos, los nódulos, los edemas o las laringitis crónicas. Anualmente en el Hospital Regional Universitario de Málaga se ve a más de 200 pacientes con esta problemática.