De hacer historias a en papel y tinta a tener su propio paseo cerca de la avenida de Europa. Rafael de Loma ya forma parte del callejero de Málaga desde este lunes, día en el que el Ayuntamiento de Málaga ha rendido un homenaje al periodista fallecido hace ya una década, impulsado por la Asociación de la Prensa de Málaga. El paseo ‘Periodista Rafael de Loma’, en la barriada de Dos Hermanas del distrito Carretera de Cádiz, se ha inaugurado arropado por el cariño de sus familiares, compañeros de profesión y la admiración de los presentes por haber sido un símbolo del periodismo comprometido durante la transición democrática.
El acto, cargado de emoción y recuerdos, ha contado con la presencia del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; la presidenta de la Asociación de la Prensa de Málaga (APM), Elena Blanco; y el periodista José María de Loma, hijo del homenajeado. Todos han coincidido en el impacto de la trayectoria de De Loma tanto en la prensa local como en el avance democrático de la ciudad.
Pionero en tiempos de cambio
Rafael de Loma, nacido en Ceuta en 1960 y afincado en Málaga desde su juventud, dirigió El Sol de España entre 1976 y 1982, en plena transición política. Durante su etapa al frente de este diario, convirtió el medio en un bastión de la libertad de expresión, en una época en la que el periodismo todavía enfrentaba las limitaciones heredadas del franquismo. “Dirigir un periódico en aquellos años exigía valentía y una visión clara del papel del periodismo en la construcción de una democracia”, ha señalado el alcalde.
Además de El Sol de España, De Loma dejó huella al frente de El Sol del Mediterráneo y fundó los diarios La Tribuna de Marbella y Marbella Tribune, este último pionero en la publicación en inglés en la Costa del Sol. Su hijo, José María de Loma, ha evocado con orgullo la figura de su padre, a quien ha descrito su admiración por su padre, capaz de crear medios que reflejaran una realidad convulsa y en transformación.
Reconocimiento merecido
Elena Blanco, presidenta de la APM, ha recordado que De Loma recibió la Medalla de Oro de la Asociación en 2008, el mayor reconocimiento de la organización. “Málaga preserva hoy no solo la memoria de un gran periodista, sino también la importancia del periodismo como pilar de la democracia, siendo un maestro del condicional con gran dominio del lenguaje”.
El legado del periodista, como han destacado los asistentes, trasciende las palabras: formó a generaciones de periodistas y contribuyó a transformar la narrativa de un país que despertaba a la democracia. Es por ello por lo que, con la inauguración del paseo, Málaga ahora no solo inmortaliza su nombre, sino también los valores que defendió durante toda su vida. Como ha subrayado su hijo, “nadie muere mientras se le recuerde”, y este rincón de la ciudad será ahora testigo de historias que mantendrán vivo el espíritu de Rafael de Loma.