El ‘Proyecto Soludable’ del Hospital Costa del Sol de Marbella ha celebrado este martes una jornada para conmemorar el Día Mundial del Melanoma. Se realiza todos los años el 23 de mayo. Se han organizado sesiones dirigidas a profesionales, a pacientes y también a la población en general.
A la presentación de este encuentro, que ha tenido lugar en el salón de actos del hospital, han asistido el director gerente del Hospital Costa del Sol, Antonio Cansino Osuna; el vocal provincial de Misión de la Asociación Española contra el Cáncer de Málaga, Antonio Pérez Rielo, y la directora del área de Dermatología del Hospital Costa del Sol y directora del Proyecto Soludable, Magdalena de Troya Martín.
El objetivo principal de estas sesiones es concienciar sobre la importancia de prevención del melanoma y de su diagnóstico precoz y ha contado con la presencia de numerosos expertos en el diagnóstico, tratamiento, investigación y evolución de este tipo de cáncer de piel; así como con el testimonio e historia real de un paciente con esta patología.
Como recuerdan en un comunicado, la fotoprotección es la mejor herramienta de prevención del cáncer de piel, puesto que la exposición a los rayos UV aumentan significativamente el riesgo de padecer melanoma.
Por tanto, se trata de una actividad que forma parte de la estrategia de este proyecto en el ámbito sanitario. Soludable contempla la salud desde una perspectiva integral de bienestar físico, mental y social. Este proyecto pretende conseguir una exposición solar moderada. Apostando por mensajes equilibrados y fotointeligentes y, sobre todo, por unos estilos de vida activos al aire libre que beneficie la salud integral.
El área de Dermatología del Hospital Costa del Sol ha detectado en 2022 un total de 111 melanomas, en 106 pacientes, puesto que cinco de ellos presentaba más de un melanoma al mismo tiempo. En relación al estadío de estos tumores en el momento del diagnóstico, factor de gran importancia para el pronóstico del paciente, el 80,1% se diagnosticaron teniendo un espesor tumoral inferior a 1 mm, lo que se considera un diagnóstico precoz y se asocia a un mejor pronóstico.
La incidencia ha sido algo mayor en varones que en mujeres (58,4% en varones frente a 41,5% en mujeres), siendo la edad media ligeramente superior en varones que en mujeres (64 años frente a 61 años, respectivamente). En cuanto a la localización, el tronco es la región más frecuente en ambos sexos, siendo el segundo lugar en frecuencia la cabeza y cuello en el caso de los hombres y las extremidades superiores en el caso de las mujeres.
El registro de diagnósticos de melanoma cutáneo llevado a cabo por el Hospital Costa del Sol desde 2002, muestra un aumento progresivo en la incidencia de este tumor. A pesar de ello, se ha observado cómo el porcentaje de tumores diagnosticados con un tamaño entre 1-4mm se ha reducido en favor de los diagnosticados con menos de 1mm.
SESIONES DE LA JORNADA
Estas cifras han sido expuestas a lo largo de esta jornada. La cita ha comenzado con la presentación del acto por parte de las autoridades. Posteriormente, los asistentes han podido conocer en primera persona el testimonio de un paciente con melanoma y, a continuación, ha tenido lugar la mesa de expertos: ‘Melanoma y vitamina D’ moderada por la directora del servicio de Oncología del Hospital Costa del Sol, Cristina Quero Blanco.
A través de los diferentes trabajos en esta mesa se han expuesto, además del registro de melanomas en nuestra área, cuál ha sido su evolución en el Hospital Costa del Sol en los últimos años. Esta charla ha sido ofrecida por la dermatóloga de este hospital, Inés Fernández Canedo. Más tarde, el oncólogo médico también de este centro, Víctor Navarro Pérez, ha ofrecido su ponencia ‘Melanoma y vitamina D: cómo influye en el pronóstico’ a través de la cual ha expuesto cómo la identificación de biomarcadores así como de otros elementos ayudan a mejorar la supervivencia de pacientes, lo que, según sus palabras se convierte en «una cuestión de gran relevancia».
Para Víctor Navarro, «cada vez existen más estudios que identifican la vitamina D como un marcador pronóstico de esta enfermedad. Se ha descrito el papel modulador de esta vitamina en el proceso de diferenciación celular, proliferación y regulación, y, por tanto, su implicación en el desarrollo de distintos tumores, incluido el melanoma».
Estudios publicados en revistas de impacto han establecido la relación de niveles de vitamina D y su asociación a factores pronósticos tan relevantes como el espesor de Breslow (medida de la profundidad hasta la que crece un melanoma en la piel), además de la mortalidad por melanoma. En este sentido, ha destacado, «se ha observado en estudios que, incluso en áreas de exposición solar, se puede detectar un déficit de vitamina D, de ahí, la importancia de plantear campañas de detención precoz con el propósito de realizar un tratamiento suplementario con vitamina D3 y asegurar, de este modo, un adecuado nivel vitamínico que permita prevenir alteraciones en la homeostasis o incluso su papel preventivo en algunos tumores».
A continuación la responsable de unidad de Dermatología del hospital y subdirectora del proyecto Soludable, Nuria Blázquez Sánchez, ha ofrecido su ponencia ‘Fotoprotección y vitamina D: cómo combinarlo? Con ella explicaba que la «vitamina D es una molécula necesaria para la absorción del calcio en el cuerpo humano y, además que, estudios han demostrado que tiene importancia más allá de la densidad ósea». De esta manera, ha matizado, «participa en la regulación de la presión arterial, en la defensa contra el desarrollo de ciertos tipos de cáncer, en la diabetes, en la esclerosis múltiple, en el lupus o en la psoriasis, entre otras patologías».
En este contexto ha planteado la pregunta «¿Cómo combinar correctamente la fotoprotección para prevenir el cáncer de piel con la exposición solar, principal fuente de la vitamina D? En este sentido, ha expresado que «se recomienda aprovechar aquellas horas del día que el índice de radiación ultravioleta es baja para asegurar los niveles adecuados de la vitamina del sol. Además, así se asegura evitar las quemaduras solares, principal causante de los diferentes cánceres de piel».
Finalmente, ha añadido la existencia de aplicaciones para móviles que calculan de forma personalizada el tiempo de exposición solar necesaria según la hora y el fototipo para sintetizar vitamina D. En general, unos 5-20 minutos, 2 o 3 veces a la semana son suficientes» ha concluido. En esta sesión también se ha llevado a cabo un sorteo de productos fotoprotectores entre los asistentes.
Durante esta jornada también se ha ofrecido a los asistentes la posibilidad de realizarse chequeos cutáneos por parte de los dermatólogos para identificar factores de riesgo. Se han realizado exámenes mediante el uso de luz de Wood y dermatoscopia de lunares, todo ello acompañado de asesoramiento personalizado. Además de entrega de muestras de cremas adaptadas a cada tipo de piel gracias al patrocinio de La Roche-Posay, Cantabria Labs, Avène, Eucerin y Galenicum. En estas jornadas también han participado como patrocinadores IllumsUV y Sunday Afternoons, sombreros con FPS 50+; y From Sun With Love, marca de prendas fotoprotectoras certificadas.
