Apenas dos días después de hacerse con el Goya, Salva Reina fue el invitado especial de este lunes en ‘La Revuelta’. El actor malagueño apareció en el programa de éxito de la televisión pública para hablar de su reciente reconocimiento como ‘Mejor actor de reparto’ en la última gala de los afamados premios. Y lo hizo, como de costumbre, en una entrevista repleta de humor.
Para empezar, irrumpió en el escenario apoyado en una muleta, lo que dio paso a las primeras bromas del presentador David Broncano: «Venía tocado del menisco y me toqué más», afirmó entre risas Reina, reconociendo que el origen de la lesión era ser un «pureta».
Durante la entrevista, el cómico presentó al público entre confetis el «cabezón» -nombre coloquial que recibe el premio Goya-, aunque resultó no ser el original, sino un busto de Buda: «Tiene que haber una casa en Granada con un Goya. Hago un llamamiento, por si alguien se está preguntando donde está su Buda», bromeó Reina arrancando las carcajadas del público.
La gran ilusión de Salva Reina
Como suele ocurrir en algunos programas, los invitados traen regalos -a veces en forma de entradas a sus conciertos u obras- para los asistentes. En el caso de Reina fueron ‘chupachups’, ya que, según reveló, la productora no le permitía invitar a todos a una caña, que fue su primera intención.
Fue entonces, justo antes de lanzarlos al público, que el actor reveló uno de sus grandes sueños tras la consecución del Goya: «Lo que más ilusión me hace es ser el Rey Melchor. Lo dejo aquí como una propuesta , eso sería la ilusión más grande de mi vida», se sinceró Reina.
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