Aunque se trata de un fenómeno meteorológico propio de inicios y finales del periodo estival, la niebla de advección o taró, como es conocido por los malagueños y el mundo marinero, ha hecho acto de presencia en Málaga en vísperas de diciembre.
A lo largo de este sábado, la neblina ha ido cubriendo la costa de la comarca de la Axarquía, adentrándose en el interior y extendiéndose hacia la capital y el litoral occidental con la caída de la tarde. La densa humedad se hace notar también en el termómetro, bajando los grados y aumentado la sensación de frío.
Cambio climático
Durante la tarde del viernes ya se pudo apreciar la aparición de este inesperado taró en la provincia. Su causante no es otro que las temperaturas inusuales para las fechas, que ponen de manifiesto una vez más las consecuencias del cambio climático. Según los datos de Aemet, en Málaga capital este sábado se han alcanzado los 24 grados de máxima en las horas puntas del día, valores propios de la estación primaveral.
Diciembre arrancará con tiempo anticiclónico y pocas lluvias
Esta nube de niebla se produce cuando el aire cálido de la superficie entra en contacto con el mar, que se encuentra a menor temperatura. Esto provoca una rápida evaporación de agua, que forma nubes muy concentradas de humedad que rozan el 100%.
La situación geográfica de Málaga, en la costa, rodeada de montañas y expuesta al terral, la convierten en un sitio propicio para que se produzca este fenómeno meteorológico tan singular.
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