Foto: ACB.com
Sin Alberto ni Darío, los de Ibon Navarro sacaron adelante un partido trabado que se complicó antes del descanso. Sin embargo los cajistas fueron resolutivos en una segunda parte en la que los catalanes no bajaron el ritmo. Con cinco jugadores por encima de la decena de puntos de entre los que destacan los 17 de Kalinoski, Kravish fue el más valorado al quedarse muy cerca del doble-doble.
El Unicaja Baloncesto suma su undécima victoria consecutiva ante el Baxi Manresa (97-88) en el encuentro adelantado por la Final Four y que debía disputarse dentro de 10 días. Pero este equipo está lanzado y no perdona ni una. Porque en el Carpena se encontró a un conjunto catalán que llevó la voz cantante durante un dubitativo primer tiempo en el que el “Factor Harding” fue crucial.
El escolta norteamericano protagonizó unos excelsos 20 minutos. Sus 15 puntos marcaron el camino de los de Pedro Martínez, que se marcharon al descanso con un +6 en el electrónico (37-43).
Ese fue el pecado del Manresa, pasar por vestuarios. Porque Ibon aprovechó el entretiempo para pegar varios tirones de oreja a un equipo irreconocible. Con talento y orgullo, Osetkowski y Perry pusieron la primera piedra de la remontada (53-53, min 25). Y Kalinoski hizo lo demás liderando un parcial de 10-5 (63-60, min 27).
La bestia despertó ya dentro del último cuarto con un 8-0 que tuvo a Will Thomas como actor principal (85-75, min 35). Una distancia que mantuvo Perry a base de triples para cerrar el partido con el 97-88 final.
El Unicaja consigue por tanto la undécima victoria consecutiva ante un batallador Manresa que estuvo en el partido hasta el último suspiro. El más valorado fue Kravish, que rozó el doble doble (9 puntos y 8 rebotes, 19 valoración). Mientras que Kalinoski fue el máximo anotador con 17 puntos, escoltado por Perry y Osetkowski (13).