El Unicaja ganó aunque le tocó sufrir hasta el último cuarto, donde metieron la sexta marcha y contrarrestaron la ventaja de un BAXI Manres que estuvo más de 30 minutos por delante del marcador. El previo al partido fue muy emotivo, con Salva Reina y la nueva Copa del Rey como protagonistas. El Carpena luchó por la victoria y se divirtió con los visto en pista, que mostró a dos equipos que pusieron toda la carne en el asador. Kameron Taylor, Perry y Tyson Pérez fueron los mejores de un encuentro que no contó con Alberto Díaz ni Osetkowski.
Ficha técnica:
Unicaja (105): Balcerowski (4), Barreiro (0), Djedovic (6), Tillie (3), Perry (18); Tyson Pérez (11), Ejim (5), Kalinoski (13), Taylor (20), Carter (8), Kravish (13), Sima (4).
BAXI Manresa (97): Massa (9), Alston Jr (19), Hunt (16), Pérez (2), Traoré (8), Vescovi (4), Reyes (15), Steinbergs (9), Sagnia (-), Saint-Supery (7), Obasohan (-), Cate (8).
Parciales: 20-27, 29-29, 25-22, 31-19. Al descanso el resultado fue de 49-56.
Árbitros: Rafael Serrano, Francisco Araña y Andrés Fernández.
Pabellón: Martín Carpena.
Tras un emocionante recibimiento al Unicaja al grito de “campeones, campeones” y la bajada de la lona, que corrió a cargo de un emocionado Salva Reina, tocó poner el foco de vuelta en la pista. El inicio de los malagueños no fue brillante, pues Manresa llevó la iniciativa y consiguió ponerse con 9 puntos de ventaja en el ecuador del cuarto. Ibon paró el encuentro con la intención de frenar la escapada visitante. Carter y Steinbergs se retaron de cara al triple y se animó un poco más el choque. Los de verde y morado cerraron el primer tiempo con un parcial de 4-0 que les acercó a la marca del BAXI (20-27).
Al Unicaja le bastó con 1 minuto y 15 segundos para dar la vuelta a la tortilla con una reanudación donde salieron enchufados. Los malagueños lograron un parcial de 8-0 que les puso por delante en el marcador por primera vez en el partido. El técnico Diego Ocampo lo paró y los catalanes recondujeron el rumbo.
Fue un intercambio de golpes a partir de ahí, donde el Manresa cosechó un parcial 0-8 que les elevó en el electrónico. Esta vez al Unicaja le costaba contrarrestar el juego rival, pero a base de triples logró acercarse nuevamente (45-49). A pesar de ellos seguía sin ser suficiente y se vieron algunas muestras de frustración Ibon Navarro, al que le pitaron técnica poco antes del descanso. Terminó la primera parte con un triple sobre la bocina de Álex Reyes que puso la diferencia en siete puntos (49-56).
La vuelta de vestuarios tuvo al Manresa desconcertado y el Unicaja lo aprovechó adueñándose del rebote y poniéndose a tres puntos. Los visitantes se negaban a perder su ventaja ante un Unicaja que seguía siendo paciente. Superado el ecuador del tercer tiempo, los de Ibon se pusieron a dos puntos. Ambos conjuntos siguieron en su línea y terminó el cuarto con 74-78.
Un último cuarto decisivo
En el último tiempo echó el resto Unicaja, especialmente en los minutos finales. La ajustada diferencia entre ambos hacía vislumbrar que un arreón por parte de uno de ellos podría significar prácticamente la victoria. Un parcial de 12-3 aupó al Unicaja a falta de dos minutos. Cuando restaban 40 segundos el cuadro malagueño ganaba 103-94 y todo indicaba que iba a estrenar su vuelta a la Liga con una victoria. Así fue y el Unicaja certificó una victoria de paciencia y esperar su momento ante un BAXI Manresa que volvió a poner las cosas difíciles (105-97).
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