La comparsa El veneno del rincón acude al Teatro Falla para regalarnos un par de coplas más. Roberto Fabio Gómez y José Juan Pastrana se encargan de la composición. Aroa Gómez Ripoll dirige la comparsa.
Estas payasas o arlequines vuelven al Falla para renovar parte de su repertorio en cuartos de final. Se presentan como un homenaje para el Carnaval de Cádiz más puro y añejo: «veneno de mi comparsa, veneno de tu comparsa».
La primera letra habla de la clase obrera y reivindica sus derechos laboral. Se tratan varios temas como el amianto que envenenó a los obreros durante muchísimos años. Así, se reivindican los accidentes laboral y las malas condiciones que los obreros tienen que aguantar en sus puestos de trabajo.
El segundo pasodoble es una reivindicación del papel de la mujer en el Carnaval de Cádiz: «no te vi disgustado cuando las gracias hace un hombre». Apoyan de esta manera a todas las compañeras que, como ellas, concursan en el COAC y luchan por hacerse un hueco en un mundo de hombres: «que nuestra fiesta nació tan libre como mi tierra y sus mujeres».
El primer cuplé va dedicado al pregón de Joaquín Quiñones y a la polémica de este con Tino Tovar. El segundo hace un chiste con un satisfayer que le regalaron en Reyes y la posición de la prensa en el Falla. En el estribillo, estas comparsistas piden: «abre los pabellones, abre los pabellones, abre los pabellones».
En el popurrí, estas comparsistas adoptan una posición de semicírculo para hablar de Cádiz y de su carnaval, se recuerda el concurso de antes. Dedican también una cuarteta a Miguel Clares, personaje muy conocido en la ciudad de Cádiz.