Desde las 13 horas a las 21 horas del viernes, 19 de julio, la Agencia Estatal de Meteorología anuncia temperaturas extremas de hasta 41 grados por lo que queda activada en ese tramo horario la alerta naranja en Jerez.
El termómetro comienza a subir el jueves a 39 grados cuando se decretará alerta amarilla en la provincia, para pasar el viernes a los 41 grados mencionados, en lo que será la primera ola de calor del verano.
El Ayuntamiento adaptará el horario de todo el personal municipal de oficio, que realiza sus labores en la vía pública, de 7 a 13 horas, que es cuando está decretada la alerta naranja por altas temperaturas.
Recomendaciones de Protección Civil
El Servicio Local de Protección Civil recomienda a los ciudadanos que se protejan y extremen las precauciones ante los riesgos derivados de temperaturas extremas por calor, con especial atención a los colectivos más vulnerables.
Se aconseja estar informado a través de los medios de comunicación y seguir las recomendaciones. Hay que adoptar determinadas pautas de comportamiento que sirven tanto para protegernos a nosotros mismos como para preservar los recursos hídricos y evitar incendios forestales, cuya declaración y propagación se ve favorecida por las altas temperaturas.
Recomendaciones ante una situación de temperaturas extremas por calor:
Limitar la exposición al sol, permanecer en lugares protegidos del sol el mayor tiempo posible y mantenerlos bien ventilados.
Hay que tener en cuenta que, al entrar o salir de estos lugares, se producen cambios bruscos de temperatura que pueden afectarle.
Tomar comidas ligeras y regulares, bebidas y alimentos ricos en agua y sales minerales, como las frutas y hortalizas, que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor.
Vestirse con ropa adecuada de colores claros, cubriendo la mayor parte del cuerpo, especialmente, la cabeza.
Evitar ejercicios físicos prolongados en las horas centrales del día.
Interesarse por personas mayores y enfermas próximas, que vivan solas o aisladas.
En casa:
Cerrar las ventanas y cortinas de las fachadas expuestas al sol y abrirlas de noche, facilitando las corrientes de aire.
Mantener las medicinas en lugar fresco, el calor puede alterar su composición y efecto.
Seguir una dieta ligera, preferentemente de frutas y legumbres. Evitar las comidas calientes y copiosas.
Preparar los biberones en el momento de darlos.
Usar el aire acondicionado o en su defecto ventiladores, si no se tiene procurar ir a lugares públicos con refrigeración.