Cuando hablamos de catástrofes naturales como terremotos o tsunamis desde España lo miramos con cierta distancia. Cierta porque no es un país ajeno a la presencia de seísmos. Sin embargo, un tsunami ya nos aventura a la ficción de una película hollywoodense.
Pese a lo incrédulo que puede parecer este escenario, la UNESCO, en una conferencia de prensa sobre el sistema mundial de alerta contra maremotos ‘Tsunami Ready‘, alerta sobre la «alta» posibilidad que suceda en el Mediterráneo, en los próximos 30 años, un evento de este tipo a nivel «catastrófico».
Al respecto, el secretario de la Comisión Oceanográfica (COI) de Unesco, Vladimir Ryabinin, aclaró que «no hay un 100 % de probabilidades de que suceda, pero estas son muy altas y tenemos que estar preparados para ello«.
Actualmente, hay 40 zonas costeras de 21 países que cuentan con el» reconocimiento de la Unesco de estar preparadas para sufrir un tsunami», cuenta la agencia EFE, un tema que será protagonista en la cumbre de los océanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que tendrá lugar en Lisboa desde el próximo 27 de junio.
En este contexto, en la Decimoséptima sesión del Grupo Intergubernamental de Coordinación del Sistema de Alerta Temprana contra los Tsunamis y Atenuación de sus Efectos en el Atlántico Nororiental y el Mediterráneo y Mares Adyacentes (ICG/NEAMTWS), se reconocieron 10 comunidades «preparadas» para tsunamis para 2023, una de ellas es española.
Zonas «Tsunami Ready» del Mediterráneo
En la sesión, se estableció que las comunidades del mediterráneo que han tenido avances y que entran en el ‘Tsunami Ready’ son Bouches-du-Rhône y Cannes (Francia); Cos (Grecia); Israel; Minturno, Pachino, Palmi (Italia); Marsaxlokk (Malta); Azores, Cascais, Lagos, Lisboa, Madeira, Portimão, Setúbal (Portugal); Chipiona (España), Bodrum y Estambul (Turquía).
Chipiona, único municipio español preparado para un tsunami
El único municipio de España que ha sido reconocido por la UNESCO como área segura y que entra en el programa europeo ‘Tsunami Ready’ es Chipiona, en la provincia de Cádiz. Las acciones que han puesto en marcha desde el municipio andaluz, en colaboración con el Instituto de Hidráulica Ambiental de la Universidad de Cantabria, se deben a la cercanía que tiene esta localidad a una zona activa de placas tectónicas.
Fuente: EE