El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha presentado este lunes un plan de calidad institucional con 60 medidas en el ámbito legislativo, ejecutivo y judicial para mejorar la calidad de la democracia, acabar con el «nepotismo y la opacidad» y frenar la «erosión» de las instituciones ante la «deriva» abierta por Pedro Sánchez. Tras asegurar que el PP tiene que «rebelarse» ante lo que está ocurrido, ha pronosticado que la respuesta del «sanchismo» será «menosprecio, descalificación y falsedad».
El jefe de la oposición ha elegido Cádiz -el Oratorio de San Felipe Neri- para presentar este plan de regeneración, dado que fue el lugar donde se promulgó la Constitución liberal de 1812, conocida popularmente como la ‘Pepa’. Ha estado acompañado del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y el vicesecretario de Institucional, Esteban González Pons, entre otros.
En su discurso, ha justificado su presentación en este lugar porque en Cádiz en 1812 «nace un constitucionalismo entendido como casa común de los españoles de todas las tendencias» y se trazan las líneas de una patria dotada de soberanía popular, instituciones firmes y división de poderes.
Feijóo ha alertado del «riesgo» que hay en España porque desde el Gobierno se «erosionan» las instituciones, con un «desprestigio deliberado» o un «uso partidario de instituciones clave para una convivencia social y política ordenada», al tiempo que se sigue el «guión que escriben los anticonstitucionalistas», ya sean «independentistas o populistas».
Aplicarlo en sus 100 primeros días de gobierno
El líder del PP ha firmado públicamente este documento, que pretende impulsar en sus 100 primeros días de Gobierno si llega a Moncloa. «Un gran país necesita instituciones a su altura. Aquí está mi compromiso para lograrlo y volver a ponerlas al servicio exclusivo del interés general», ha escrito junto a su rúbrica.
El presidente del PP ha señalado que están inmersos en una «deriva» que ha superado ya su «capacidad de asombro» y por eso el PP ha dado el paso de presentar un plan que incluye «diagnóstico certero y justo» con «principios sólidos y necesarios» en España en este momento.
En este sentido, ha dicho que el PP tiene que «rebelarse» y demostrar que hay otra forma «mejor» de hacer política porque «desde que el sanchismo entró en acción, nadie se atreve a desmentir ningún dislate». «El PP está hoy aquí para denunciarlo y para algo más, porque los ciudadanos necesitan algo más», ha declarado.
Crear una oficina de calidad democrática
Feijóo ha detallado que el plan recoge 60 medidas para mejorar la calidad democrática, acabar con el «nepotismo, la arbitraridad y la incapacidad» y están distribuidas en cinco apartados. En primer lugar, el documento enumera medidas para proteger la integridad territorial del Estado, recuperando el delito de sedición, dejando sin efecto la reforma de la malversación y tipificando el delito de referéndum ilegal.
En segundo lugar, incluye propuestas para garantizar las funciones del poder legislativo y la calidad de las leyes limitando el recurso al real decreto ley, regulando la periodicidad del Debate sobre el estado de la Nación y creando una Oficina de Calidad Democrática.
El tercer apartado, recoge iniciativas para un mejor gobierno como garantizar que la alcaldía recaiga en la candidatura que logre mayor respaldo popular directo en las urnas; establecer una comunicación institucionalizada y frecuente entre el presidente del Gobierno y el líder de la oposición y prohibir el uso de recursos públicos en actos de un partido.
En cuarto lugar, el PP plantea medias para mejorar el Poder Judicial: limitar las puertas giratorias y reforzando las exigencias de independencia en el TC y en el CGPJ; y establecer un mandato de cinco años para el fiscal general del Estado, desvinculándolo del mandato del Gobierno.
Medidas para el CIS, CNI, INE o RTVE
El último apartado incluye actuaciones para «recuperar el prestigio de las instituciones», estableciendo requisitos de idoneidad para dirigir los organismos reguladores y con medidas para recuperar la credibilidad y la independencia de las instituciones que se han visto menoscabadas en esta legislatura. En concreto, recoge propuestas específicas para el CIS, el INE, el CNI y RTVE, según ha dicho Feijóo.
El presidente del PP ha indicado que están a «tiempo de frenar la erosión de las instituciones y recuperar el sentido de Estado» y ha recalcado que este «contrato» que ha firmado es una muestra de su compromiso con España y una «herramienta contra la resignación».
«Defendemos que una política mejor es posible y la mejor manera de alcanzarla es con instituciones sólidas, prestigiosas y al servicio de los ciudadanos», ha apostillado, para recalcar que el PP ha querido dar este paso al frente en este «momento crucial» de la democracia española y por las «turbulencias» que se están produciendo.
Un gobierno «intervenido» y «rehén»
Feijóo ha reconocido que en el PP no son los «únicos en el mundo alarmados» ante los pasos que se están dando para «debilitar» el Estado de Derecho y ha añadido que en otro «lugares» también se alzan otras voces de diferente «procedencia ideológica» que alertan de lo que está ocurriendo con «posiciones iliberales». «Lo rechazamos y nos proponemos combatirlas», ha aseverado.
Según ha recalcado, la tarea «más acuciante» de la democracia española es defender ese espacio común «donde todas las ideologías democráticas convivan, debatan y se alternen». A su entender, el principal cometido es «evitar los comportamientos antidemocráticos», evitar «los abusos de poder» y obligar a respetar los procedimientos propios de la democracia.
Feijóo ha indicado que esta labor tendría que corresponder en primer lugar a un Gobierno, que debería tomar la iniciativa, pero ha lamentado que en este caso esté «lamentablemente enfrente», algo que ha achacado a que se trata de un Ejecutivo «intervenido» que asume su condición de «rehén».
«Nosotros no somos ni seremos rehenes de nada ni de nadie», ha agregado, para añadir que están convencidos de que son «muchos más los españoles moderados» y «hastiados» por lo que «el sanchismo está haciendo». Y por eso, ha reiterado, que el PP quiere ofrecer una respuesta «meditada, factible y capaz de ser asumida por quienes sin ser del PP comparten» esta preocupación y «ansían una reacción democrática».
Anticipa «menosprecio» y «descalificación» por el «Sanchismo»
Feijóo ha pronosticado que la respuesta del «sanchismo» a su plan de calidad institucional para «revitalizar» la democracia va a ser «menosprecio, descalificación y falsedad», una reacción a la que, según ha dicho, el PP ya está «acostumbrado» y que muestra su «debilidad y dependencia de sus socios y aliados».
«Allá ellos, si el sanchismo no nos escucha, creo que lo harán la mayoría de los ciudadanos», ha proclamado, para resaltar que los ciudadanos merecen una democracia calidad y que las instituciones sean un espacio dotado de «una triple garantía: neutralidad, pluralidad y eficiencia», limitando al «discrecionalidad» en el ejercicio del poder.
Tras insistir en que estas medidas suponen un «contrato» con España y una «herramienta contra la resignación», ha declarado que el desarrollo de estas propuestas están a disposición del Gobierno de España si quiere implementarlas. «En caso contrario, el PP las impulsará en su totalidad en los 100 primeros días de la próxima legislatura, convencidos de que los españoles nos darán su apoyo electoral para hacerlo», ha finalizado.