El futbolista del filial del Real Betis, Félix Garreta, habló por primera vez tras superar su calvario con ese grave problema de salud. El futbolista lo ha hecho frente a los medios oficiales del club, en los que ha explicado todo este duro proceso desde su accidente, hasta poder regresar a disputar minutos sobre el terreno de juego.
Para conocer su historia tenemos que retomarnos al mes de mayo del año pasado, cuando la vida de Félix sufrió un duro revés. El jugador se encontraba cedido en el Amorebieta y como no podía jugar por sanción un partido, decidió volverse a casa para celebrar su cumpleaños.
Sin embargo, ese día que viajó cambiaría por completo su vida. Félix se desmayó bajando unas escaleras y se dio un fuerte golpe en la cabeza, por lo que lo dejaron en coma inducido. El joven defensor estuvo en este estado durante 20 días.
«tenÍa DOS POSIBILIDADES: DESPERTAR O QUEDARME EN ESTADO VEGETAL»
Los médicos le dijeron que fue un verdadero milagro y que ya podía empezar a hacer vida normal. En un primer momento, Félix no era consciente de todo lo que le había pasado. Con el paso de los días ya empezó a comprender todo, dándose cuenta de las limitaciones que empezó a encontrarse en su día a día. El futbolista reconoce que el tema de la memoria fue algo de lo que más le costaba. De hecho el propio Félix estuvo ingresado durante un tiempo en una clínica para tratar de mejorar su problema de memoria.
Regreso a los terrenos de juego
A pesar de todas las piedras que se le habían puesto en el camino a Félix, el defensor lucha día a día para poder volver al punto en el que se encontraba antes. Sabe que todavía le queda trabajo, pero por lo menos ya ha podido regresar a tener algunos minutos. Muy buenas noticias para el canterano, que seguirá peleando para algún día cumplir su sueño: vestir la elástica de las trece barras en el Benito Villamarín.
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