Diecisiete años. Se dice pronto, pero la espera ha sido larga para los alcaldes y vecinos del interior de la provincia de Málaga, que llevan casi dos décadas esperando la ampliación de la autovía del Guadalhorce más allá del desdoblamiento en el que acaba actualmente, concretamente en Casapalma, junto a la gasolinera BP que hay antes de llegar al río Grande. La luz al final del túnel comenzó a esclarecerse hace un año y medio, cuando por fin se licitó la redacción del proyecto para convertir en autovía un tramo de cuatro kilómetros de la vía A-357 entre el enlace de Casapalma y Cerralba.
Si hay algo que marca esta vía vertebral de la provincia por la que circulan miles vehículos al día es la polémica por su alto índice de siniestralidad, bautizada desde hace ya un tiempo como la ‘carretera de la muerte’, donde aún se siguen implementando medidas para evitar accidente como una gruesa línea roja de separación en el centro entre ambos sentidos.
El tramo que a día de hoy conforma el final de esta carretera se construyó en 2007 y, en principio, se justificó por la necesidad de mejorar la conexión del Valle del Guadalhorce con la capital, la costa y unir Málaga con la A-92 a través de Campillos. Todo ello, como base a la futura ampliación que ahora está más cerca. Este proyecto es la eterna asignatura pendiente para la Junta de Andalucía que, al fin, está cogiendo velocidad, aunque sea a fuego lento.
Autorización ambiental
Ha sido esta misma semana cuando la Delegación de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul del gobierno autonómico ha abierto el periodo de información pública pertinente para el expediente de autorización ambiental unificada para extender esta vía, tal y como aparece recogido en el BOJA. Esto quiere decir que la ampliación está ya en fase ambiental para los nuevos kilómetros que van a formar parte de la A-357.
Con ello, se ha establecido un periodo de consultas para aquellos vecinos que pueden ser afectados por esta ampliación conocida como el ‘Proyecto Autovía del Guadalhorce Tramo Casapalma-Cerralba’. Así, quien lo desee puede consultarlo en un plazo de 30 días hábiles desde el pasado 7 de enero, periodo en el que dicho proceso estará disponible para su consulta a través del portal de la Junta de Andalucía, además de en en las dependencias de la delegación territorial de la Avenida de la Aurora, 47, en horario de 9.00 a 14.00 horas, de lunes a viernes.
Este paso medioambiental es en realidad un paso más de la redacción del proyecto técnico para el desdoblamiento entre Casapalma y Cerralba, que arrancó hace dos año, y que supondrá extender la la autovía cuatro kilómetros más allá. Por otro lado, ya está en proceso la redacción de siguiente tramo comprendido entre Cerralba y Zalea, de otros cuatro kilómetros más. Así, el Gobierno andaluz continúa con su intención desbloquear al eje Málaga-Campillos-Ronda, que llevaba en punto muerto desde 2007.
Con todo esto, las mejoras para la saturación de vehículos cada día circulan por la provincia y el impulso del transporte público, este lunes arrancan las obras del nuevo carril bus-VAO que conectará la A-357 con la entrada a la capital de una forma más sostenible y, de momento, sin afectar al tráfico hasta el próximo 20 de enero.
Después de casi dos décadas, la autovía del Guadalhorce vuelve a estar entre las prioridades del gobierno autonómico. Según sostienen desde la resolución de Sostenibilidad, quienes quieran presentar alegaciones deberán hacerlo en el registro electrónico general de la Junta; así como en cualquier registro de la Consejería de Sostenibilidad.
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